Carlos Herrera-ABC
- Cualquiera de los tres mosqueteros del Peugeot puede ahora mismo soltar veneno sobre Sánchez como consecuencia de sentirse ninguneados
La primera impresión que brinda el carrusel inagotable de dimes y diretes ceñido al ‘Caso PSOE, o ‘Caso Sánchez’, o ‘Caso Ábalos’, o ‘Caso Lo Que Sea’ es que iban todos contra todos. Koldo no se fiaba de Cerdán y le grababa. Cerdán no se fiaba de Ábalos y le controlaba. Ábalos no se fiaba de los dos y también grababa conversaciones en diversos soportes, los cuales ahora están siendo desencriptados y prometen momentos inenarrables. En los pen drives o discos duros que encuentra la UCO –incluidos los ocultos en las ingles de Anaís– cuentan que aparecen ministros y presidentes de comunidades con conversaciones que comprometen a unos y otros. Hasta se habla de informaciones o registros de voz que pondrían en situación límite al ministro de Interior o al propio Número Uno. Todo eso sin contar con el célebre sobre de Aldama, que por algún lugar lo tendrá oculto, y que contendría el secreto de las pirámides, las pruebas del nueve, la evidencia que condenaría a Zapatero y yo qué sé más. Se conoce que cuando uno se sumerge en el proceloso mar de las corruptelas busca no solo el beneficio propio sino la seguridad de que los demás no le van a hundir en un ataque traicionero o de propia supervivencia. Seguridad total, riesgo cero, no existe al cometer actuaciones propias de bandidos; y entre bandidos es consecuente que no se fíen unos de otros. Si añadimos a ello la tradicional sordidez de los fondos bajos –que no es necesariamente lo mismo que los bajos fondos–, el cuadro se revela como un fresco impagable de los tiempos que corren. Cualquiera de los tres mosqueteros del Peugeot puede ahora mismo soltar veneno sobre Sánchez como consecuencia de sentirse ninguneados y maltratados por el líder al que le dieron todo. Ábalos, al parecer está furioso con Sánchez. Koldo con Ábalos y Cerdán. Y también con su Jefe Supremo, al que puede que hayan pillado desprevenido en alguna grabación. Koldo es de los que va con una grabadora hasta cuando pasa por los rayos X o asiste a una reunión de padres de alumnos. Y habrán grabado a a Torres, a Armengol y a alguno más, digo yo. Y España entera es un hervidero de suposiciones y de anuncios de bombas de profundidad: imaginen lo que pueden contener los gigas y gigas que incauta la Guardia Civil en todos los registros que efectúa (por orden del juez). Ahí puede estar la Biblia en verso, ministros grabando al presidente, comisionistas grabándose entre sí, maestros de la cloaca grabando a empresarios y viceversa… Hará falta un ejército entero para escuchar y clasificar todo lo que se vienen grabando unos a otros. García Page dijo anteayer una frase que puede parecer enigmática pero que lleva carga de profundidad: la gran preocupación de Sánchez no es por lo que está en los periódicos… lo que quiere decir que él sabe con quien habló y lo que dijo. Tanto él como Begoña. Pero no sabe si les grabaron.