EL CORREO 25/06/14
Antton Troitiño aseguró ayer durante la segunda jornada de su juicio de extradición que se celebra la Corte de Magistrados de Westminster en Londres que dejó de pertenecer a ETA cuando fue detenido en 1987 y que, desde que abandonó la cárcel, sólo ha querido llevar una vida normal. Mediante un escrito presentado por su defensa también mostró su apoyó el «alto el fuego unilateral» de la banda.
El histórico terrorista es reclamado por las autoridades de Madrid por los cargos de integración en el aparato logístico de ETA y estar en posesión de documentación falsa cuando fue detenido por primera vez en la capital británica en 2012.
La Justicia española pidió la extradición de Troitiño, de 56 años, tras su arresto el 29 de junio de 2012 a fin de aplicarle de forma retroactiva la ‘doctrina Parot’, pero el proceso encalló tras el dictamen en contra del Tribunal de Estrasburgo. En enero de este año, España reclamó de nuevo la detención y entrega del etarra, localizado por segunda vez el 13 de febrero, cuando estaba en libertad condicional.
Troitiño cumplió veinticuatro años de cárcel en España por atentados con víctimas en los años ochenta, entre otros el perpetrado en 1986 contra un autobús de la Guardia Civil en la plaza de la República Dominicana de Madrid, en el que murieron doce agentes y resultaron heridas media centenar de personas.
Salió en libertad el 13 de abril de 2011 pero, días después, la Audiencia Nacional lo volvió a requerir para imponerle retroactivamente la ‘doctrina Parot’, que hubiera fijado su excarcelación en 2017. Desde entonces estaba huido hasta que fue detenido en la capital británica.