Una victoria con interrogantes

JOSÉ MARÍA CARRASCAL, ABC – 23/03/15

· Quería una «gran mayoría» para «dar estabilidad a Andalucía». Pues bien: no lo ha conseguido.

Ya sabemos que todos los participantes en unas elecciones encuentran de un modo u otro proclamarse vencedores, cosa a todas luces imposible. Pero en las andaluzas de ayer ha ocurrido algo realmente extraordinario: la vencedora en números es Susana Díaz, que venía gobernando coaligada con Izquierda Unida, tenía ante ella una legislatura sin problemas –acababa de pasar los presupuestos de este año sin problemas–, rompió la coalición y convocó elecciones anticipadas. Sobre las razones de hacerlo corren todo tipo de teorías, desde que su último objetivo era la Secretaría General del PSOE a que quería revalidar su autoridad sobre el PSOE andaluz, pero lo único seguro es lo que ella misma nos ha dicho a lo largo de su campaña electoral: que quería una «gran mayoría» para «dar estabilidad a Andalucía».

Pues bien: no ha conseguido ni lo uno ni lo otro. El número total de diputados que ha logrado son 47, los mismos que obtuvo en las anteriores elecciones y lejos de la mayoría absoluta, 55. Los daños son aún mayores: le va a ser difícil el conseguir una mayoría gobernable, al no salirle los números para formar ese tipo de coalición. Sólo con el PP podría formarla, pero ella misma se cerró tal puerta al haber dicho «no formaré coalición con el PP ni con Podemos».

Ni creemos que el PP o Podemos, vistos los resultados, estén dispuestos a formar coalición con ella. En cuanto a Ciudadanos, sí, se han mostrado dispuestos a colaborar, pero poniendo altas condiciones, que empiezan porque el PSOE se distancie de Griñán y Chaves y haga limpieza en el asunto de los ERE, lo que no sabemos si la dirección del partido lo aceptaría. Aparte de que Ciudadanos debe de andarse con muchísimo cuidado de no perder su virginidad política por un plato de lentejas, como la perdería si se mostrase dispuesto a pactar con un sistema tan corrupto como el que los socialistas han montado en Andalucía. En resumen, que doña Susana ha ido por lana, como Más en Cataluña, anticipando las elecciones, creyendo que iba a ganarlas de calle, y ha resultado que se encuentra en una situación más vulnerable que antes.

Y si esto ocurre en el que ha sido hasta ahora un feudo socialista, no creo que sea una buena noticia para ellos, aunque puede ser para Pedro Sánchez, que se quita de encima la sombra de Susana Díaz. Aunque a ésta le ha funcionado el haberse envuelto en la bandera andaluza incluso en la indumentaria, vistiendo chandal verde y camisa blanca en los debates y en los mítines. Sin duda Andalucía es hoy la región más conservadora y más nacionalista de España.

Para resumir: PSOE y PP siguen siendo los principales partidos, pero sufren un serio desgaste, mientras Podemos y Ciudadanos crecen. ¿Seguirán creciendo o frenarán su marcha? ¿Son trasvasables los resultados andaluces al resto de España? ¿Cambiará la situación política y económica española de aquí a las elecciones generales? son las preguntas que estas elecciones no nos han contestado. La situación es más resbaladiza que nunca.

JOSÉ MARÍA CARRASCAL, ABC – 23/03/15