Ramón Pérez-Maura-El Debate
  • Confieso que la creación de comunidades autónomas como Madrid o Cantabria me pareció disparatado en su día. Pero en esta hora doy gracias a Dios por su existencia

Alberto Núñez Feijóo compareció ayer en el programa de Carlos Herrera para constatar la gravedad del momento y tomar la iniciativa de hacer lo que el Gobierno no está haciendo. Destacadamente convocar una conferencia de presidentes autonómicos. Sánchez, en toda su desfachatez, no ha convocado hasta ahora la conferencia de presidentes autonómicos porque no quiere tener delante a quince presidentes –los de las comunidades autonómicas gobernadas por el PP más Ceuta y Melilla– diciéndole de todo menos bonito. Es decir, la Verdad de la hora presente de España.

Una realidad que creo muy poco cuestionable es que, aunque muchos votantes de Vox denuncien el sistema de las autonomías, si no fuera por él en este momento el poder de Sánchez sería omnímodo. Evidentemente no se concibió este sistema autonómico como una forma de contrapoder. Pero en la práctica lo está siendo como lo demuestra la inquina que tiene la izquierda a dirigentes como Isabel Díaz Ayuso. Yo mismo confieso que la creación de comunidades autónomas como Madrid o Cantabria me pareció disparatado en su día. Pero en esta hora doy gracias a Dios por su existencia.

Es evidente que no es lo mismo una conferencia de presidentes con la presencia del presidente del Gobierno que un acto que será descalificado por la izquierda como «partidista». Pero igual que Sánchez dice que su condición de presidente del Gobierno es inescindible de su persona cuando tiene que (no) declarar ante el juez, los presidentes autonómicos que acudan a la convocatoria de Feijóo en septiembre, por muy del PP que sean ellos y la convocatoria, serán los presidentes de quince comunicades o ciudades autónomas plantando cara al presidente del Gobierno y denunciando un pacto catalán que va a hacer que en España los más pobres tengan que sostener a los más ricos.

Feijóo sostuvo que los presidentes autonómicos del PP defenderán juntos «la igualdad de todos los españoles». «Y lo vamos a hacer con toda la intensidad, con todas nuestras capacidades, porque insisto, estamos ante una urgencia nacional. Tenemos un desafío nacional que es mantener el Estado de bienestar solidario en nuestro país, como lo hemos hecho durante todo el tiempo desde la Constitución del 78» y recordó que él siempre ha pretendido hacer política desde la moderación, pero que estamos en un momento en que eso es casi imposible. Es muy difícil promover la moderación cuando se escucha a Salvado Illa asumir la Presidencia de la Generalidad hablando de «la nación catalana en una Europa federal, en ese espacio político que es España». Es decir, que Cataluña es una nación y España un espacio político. Con un par

Afortunadamente estuvo Feijóo muy claro sobre la farsa vivida la semana pasada y el «ridículo internacional» en el que el Gobierno de la nación nos ha dejado a todos. En mi opinión, quienes se empeñan en decir que el PP y el PSOE son la misma cosa, tienen en esta entrevista de Herrera una prueba contundente de que no lo son. Y quienes dicen que el PP y Vox son la misma cosa, también tienen difícil argumentarlo escuchando al presidente del PP. Pero ya sabemos que los argumentos son armas inútiles contra quienes se creen en posesión de la verdad.