EL MUNDO, 9/4/12
El líder del PNV, Íñigo Urkullu, ha pedido al presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy (PP) que abra «un diálogo resolutivo» con ETA pues «ante la evidencia del cese definitivo de la acción armada es posible».
Urkullu ha hecho estas manifestaciones en el acto central de su partido con motivo del Aberri Eguna, festividad de la patria vasca que sólo celebran los nacionalistas.
Urkullu dice que comparte con Rajoy «la prudencia y la paciencia» ante el final del terrorismo, pero le ha pedido que «se mueva» ya. «No defraude las expectativas de la sociedad vasca. El inmovilismo no ayuda», ha dicho.
El líder nacionalista le ha pedido al PP «que no se estanque en la excepcionalidad del pasado» y que dé pasos para «la paz y la normalización» en el País Vasco. «Las normas jurídicas vigentes ofrecen margen para la acción: el acercamiento de presos es posible y la participación política plena [la legalización de Batasuna] también», ha proclamado.
‘Hay que cambiar al lehendakari’
Urkullu, por otro lado, no ha ahorrado en críticas al Gobierno vasco del socialista Patxi López. Su objetivo, ha dicho, es «cambiar al lehendakari que no celebra el día de su patria» porque «ha echado por tierra 30 años de trabajo bien hecho».
«Su falta de compromiso, de rigor, de ideas, ha dañado seriamente la solvencia y la seriedad de nuestras instituciones«, ha añadido.
Sin embargo, el gran rival electoral para el PNV en las autonómicas del año que viene parece ser la izquierda abertzale. A criticar su oferta política ha dedicado buena parte de su discurso Urkullu. Le ha afeado que quieran gobernar Euskadi «como si fuera la Nicaragua sandinista».
«Representan y defienden el pasado. Un pasado revolucionario ya superado en todo el mundo. Son pasado y están superados«, ha remachado el dirigente nacionalista.
A cambio, ha postulado al PNV como la oferta sensata para construir «la nación vasca», un país «en pie de igualdad» con España en Europa al estilo de «Croacia y Estonia» y que se mira en espejos como Escocia, Flandes o Cataluña.
Ha defendido un nacionalismo pragmático, con capacidad de gestión, el del PNV, «porque ofrece experiencia, liderazgo y decisiones».
Urkullu ha reclamado también un «nuevo estatus» para el País Vasco, que se sustanciaría a partir de 2015. «Euskadi es nuestra patria, nuestra única patria», ha concluido Urkullu.
EL MUNDO, 9/4/12