EL PAIS – 05/07/16
· El ‘lehendakari’ pide al próximo Gobierno flexibilizar su política penitenciaria.
· Iñigo Urkullu ha instado este lunes a ETA a desarmarse y disolverse antes de un año y ha pedido al próximo Gobierno central colaborar en su realización.
El lehendakari también ha pedido al Ejecutivo flexibilizar su política penitenciaria de acuerdo con la legalidad, el acercamiento de presos de ETA a las cárceles vascas y el traspaso de la gestión de los centros penitenciarios al Gobierno vasco comomedidas clave en las negociaciones políticas tras el 26-J. En los cursos de la Universidad Complutense en El Escorial, Urkullu ha precisado que estas exigencias son parte fundamental del bloque de propuestas, la llamada «agenda vasca», que el PNV presentará en la ronda de conversaciones anunciada por el presidente en funciones, Mariano Rajoy, para la constitución del nuevo Gobierno.
La «agenda vasca» se completa con medidas de reactivación económica para la salida de la recesión y el respeto del Gobierno central a la reforma del Estatuto vasco que los partidos de esta comunidad desarrollarán en la próxima legislatura. Urkullu ha lamentado la actitud del Gobierno de Rajoy durante la pasada legislatura de negarse «a tratar de acordar con las instituciones vascas cuestiones estratégicas como el desarme de ETA o la política penitenciaria». «El Gobierno español no ha querido dar ni un solo paso que permitiera culminar este proceso».
Urkullu ha recordado cómo Rajoy ha hecho caso omiso a todas sus propuestas durante esta pasada legislatura, desde el impulso a las vías de reinserción de presos de ETA como la vía Nanclares, así como el acercamiento de presos a cárceles del País Vasco. También reprochó al presidente en funciones su rechazo a la petición del Gobierno Vasco en diciembre de 2014 de que participara en la verificación del desarme de ETA cuando la banda terrorista anunció el proceso de sellado de sus arsenales y recabó la participación del Ejecutivo central. Urkullu atribuyó esta actitud de Rajoy a «cuestiones de índole interno», miradas a corto plazo y cálculos electorales.
Según fuentes del PNV, confirmadas por La Moncloa, Presidencia llamó ayer, a última hora de la tarde, a Aitor Esteban, portavoz de los nacionalistas en el Congreso, y quedaron en hablar para fijar una reunión, que puede ser esta misma semana.
Previamente, Urkullu había reprochado a ETA y a la izquierda abertzale que, tras el cese definitivo del terrorismo hace cinco años, no hayan dado más pasos unilaterales. «No se puede comprender la parálisis de ETA y de sectores de su entorno político en los ámbitos de desarme, asunción de las vías legales penitenciarias o reflexión crítica de su pasado». «La autocrítica es una actitud eminentemente política, sus efectos y objetivos son también políticos. Tiene un alto valor para abordar las asignaturas pendientes del pasado y reparar sus consecuencias», señaló en referencia a la izquierda abertzale.
Urkullu recordó, cómo ante este vacío, el Gobierno vasco se ha visto obligado a «impulsar propuestas para el desarme y para un cambio en la política penitenciaria y de reinserción». «Estoy convencido de que constituirán la base de lo que deba realizarse en el inmediato futuro», pronosticó. El lehendakari insistió en la urgencia de proceder a adoptar estas medidas porque «el proceso de pacificación llegó tarde y avanza más despacio de lo que la sociedad querría». «Una de las consecuencias de este retraso es que la reivindicación de la paz, asociada al fin de la violencia, ha sufrido en la sociedad vasca un proceso de envejecimiento rápido. Ha pasado a formar parte de una agenda antigua que tiene que ver con restos del pasado, con objetivos aplazados y alejados de las preocupaciones actuales de la sociedad vasca», señaló.
El lehendakari propuso un segundo calendario de propuestas para 2020 en los capítulos de víctimas del terrorismo como la Ley de Reconocimiento y Reparación de Víctimas, así como el programa Batera que promueve la unión entre víctimas y sociedad. También se comprometió a que se completen los informes para clarificar lo ocurrido en el periodo 1960-2010, así como el desarrollo del Centro de Documentación y los proyectos de colaboración y coordinación entre institutos memoriales.
EL PAIS – 05/07/16