EL MUNDO – 20/08/14
· El alcalde de Barcelona insiste en que la consulta se hará de forma «legal».
Ante la ausencia de plan B si el Tribunal Constitucional impugna la ley de consultas que salga del Parlament y la posterior convocatoria de referéndum, CiU prefiere insistir en que la votación se hará de forma «legal». En este sentido, una de sus voces más autorizadas, la del alcalde de Barcelona, Xavier Trias, ahondó en esta idea y advirtió al Gobierno central del riesgo de incurrir en un delito de «prevaricación» si prohíbe la cita del 9 de noviembre.
«Nos amenazan y nos recriminan que no podemos hacer nada ilegal, pero las estructuras de Estado también deben tener cuidado de actuar en la legalidad», avisó el veterano dirigente de Convergència para luego recordar que si el Gobierno «prohíbe una cosa sabiendo que es legal sería muy grave, ya que sería prevaricar».
Frente a la presión de los sectores más soberanistas del partido, de sus socios de ERC y de la influyente Assemblea Nacional Catalana –entidad que organiza la Diada–, el Govern no tiene otro plan que no pase por convocar el referéndum independentista del próximo 9 de noviembre. «No vamos a sacar las urnas desde la ilegalidad, lo vamos a hacer desde la legalidad», apuntó Trias. «Si hacemos una ley bien hecha, como estoy seguro que hará el Parlament, la consulta será legal», recordó en referencia a la norma que se aprobará este próximo mes de septiembre con los votos a favor de CiU, Esquerra, Iniciativa, el PSC y la CUP. Los socialistas, sin embargo, defienden que la ley no servirá para amparar el citado referéndum del 9 de noviembre.
En este sentido, el alcalde de Barcelona también cargó contra los que plantean aplazar la consulta si el Constitucional la impugna. «Es un error dar la imagen de que no se hará el 9-N», criticó en referencia a las posiciones más moderadas del conseller de Territorio o la vicepresidenta del Govern, quienes se mostraron reticentes a sacar las urnas a la calle en caso de veto.
La que no contempla un paso atrás en la hoja de ruta soberanista si se materializa la prohibición del TC es la Assemblea Nacional Catalana, quien presiona día tras día a CiU para sacar las urnas a la calle. Si Artur Mas no convoca la consulta, «estará incumpliendo aquello por lo que se presentó a las últimas elecciones, y debe hacer lo que hizo cuando no logró un pacto fiscal», es decir, convocar unas elecciones de cariz plebiscitario «lo antes posible», apuntó ayer su presidenta, Carme Forcadell.
EL MUNDO – 20/08/14