Ambos hicieron esta petición en sus intervenciones en el debate del pleno del Congreso que autorizó al Gobierno a convocar la consulta del próximo mes sobre el texto constitucional. El presidente del Gobierno asegura que considerará vinculante el resultado del referéndum.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el presidente del PP, Mariano Rajoy, han coincidido en pedir el ‘sí’ a la Constitución europea porque, entre otras cosas, este texto beneficiará a la unidad de España. Ambos hicieron esta petición en sus intervenciones en el debate del pleno del Congreso que autorizó al Gobierno a convocar la consulta del próximo mes sobre el texto constitucional.
Al respecto, Zapatero aseguró en su última intervención que la decisión que adopten los ciudadanos en el referéndum del 20 de febrero será vinculante, ya que, «aunque no lo sea de derecho, sí lo es de hecho».
El jefe del Ejecutivo reiteró su agradecimiento a Rajoy por haber anunciado el apoyo al texto constitucional (lo que consideró de decisión acertada para España y para el PP) y pese a las críticas realizadas al Gobierno.
Sin embargo, Zapatero se mostró preocupado por el hecho de que Rajoy justificase gran parte del apoyo a la Constitución Europea debido a que en ella había «huella» del Gobierno del PP y subrayó que ese texto «va a ser de todos» y está hecho «por todos y para todos». Además, consideró que no debe generar ninguna preocupación el hecho de que España vaya a ser el primer país donde se va a realizar un referéndum de ratificación de la Constitución.
Zapatero, quien expresó su satisfacción por el apoyo avanzado por los portavoces de los grupos a autorizar la convocatoria del referéndum, reiteró la vocación europeísta de España y las razones que considera que justifican la existencia de un texto constitucional. Razones que le llevaron a insistir en su defensa de un ‘sí’ convencido y a expresar su respeto por otras posiciones ante el referéndum.
El presidente del Gobierno ofreció algunos detalles de la campaña divulgativa lanzada por el Gobierno para informar del contenido de la Constitución Europea, momento que aprovechó para agradecer la colaboración de las instituciones y organismos que se han implicado en esa divulgación. Tras considerar que es difícil hacer una campaña más aséptica que la que ha promovido el Gobierno, defendió un debate rico «porque cuanto más debate, habrá más síes convencidos y menos noes críticos».
Zapatero calificó el referéndum de ocasión «histórica» para comprometerse con el futuro de la UE y de España y advirtió de que, si algún Estado rechazase ese texto, Europa podría quedar «inerme» y sufrir una «parálisis» en su construcción.
Por su parte, el presidente del PP, Mariano Rajoy, explicó que su partido pedirá el «sí» a la Constitución europea porque, entre otras cosas, ese texto impedirá que prosperen «los fines independentistas» pretendidos por Juan José Ibarretxe en su plan y cerrará las puertas a los «delirios de autodeterminación».
«Hoy, cuando se cuestiona la España constitucional que quisieron mayoritariamente los españoles en referéndum. Hoy cuando se trata de desmantelar por las bravas la obra de convivencia cívica más importante», cuando al margen de «nuestra legalidad se quiere decir ‘no’ a lo que significa España como Estado democrático, sociedad abierta y modelo de libertad para todos, el PP manifiesta su ‘sí’ a una Constitución que quiere, precisamente todo lo contrario».
En este sentido, subrayó que el texto europeo quiere ser de todos los europeos y edificar un marco de convivencia cívica basado en la libertad, entendimiento mutuo y el respeto a la legalidad. Rajoy, quien apuntó que a los españoles no les tranquiliza que sea Zapatero el que deba atajar la propuesta de Ibarretxe, recordó que «el PP pujó decididamente por lograr algo que ahora representa un obstáculo insalvable para que prosperen su fines independentistas».
En este sentido, se refirió al hecho de que la definición de Europa que contiene el Tratado es el de una Unión de Estados y ciudadanos. «Definir a Europa es estos términos supone cerrar la puerta a delirios de autodeterminación que reabren la caja de Pandora de los nacionalismos disgregadores del pasado», apostilló el líder del PP.
Rajoy dijo que la unidad europea que diseña el Tratado gusta al PP y añadió que éste «salvaguarda las que son las expresiones más plásticas de su soberanía: la integridad territorial, el mantenimiento del orden constitucional y la seguridad nacional».
LA VANGUARDIA, 11/1/2005