Arantza Quiroga: «La mayoría de la sociedad vasca no quiere a ‘‘Santi Potros’’ ni de vecino»

Entrevista a ARANTZA QUIROGA – Presidenta del PP vasco, ABC – 29/12/14

Arantza Quiroga
Arantza Quiroga

· Soberanismo durmiente del PNV: «El problema de Urkullu es que sabe que la realidad se impone y se ha sacado de la manga un estatus que pide casi la independencia pero dentro de España»

·  Mayor peso de la sociedad civil: «La democracia se sustentó sobre los partidos. Hay que acabar con ese reparto político y ceder poco a poco un mayor espacio a profesionales independientes»

· La líder popular cuestiona la «interlocución prioritaria» del Gobierno con el PNV, porque «arrincona» al PP en el País Vasco.

Ha sido el año político más agridulce para Arantza Quiroga (Irún, 1973). Elegida presidenta del PP vasco en un congreso tormentoso en el que tuvo al sector alavés enfrente, ahora la confección de las listas electorales le ha abierto una nueva grieta en su casa, Guipúzcoa. Allí choca con su líder provincial, Borja Sémper, que apuesta por no mover ficha en San Sebastián. Pero Quiroga está decidida a «sumar» nuevas caras que den a su electorado «un motivo para volver a votar» al PP. «Que tengan claro que aquí no hay cotos ni dedazos, porque no hay sillas», asegura, dispuesta a hacerse valer.

–¿Cómo ve su liderazgo interno hoy?

–Cuando quieres tomar decisiones, lógicamente encuentras resistencias. El reto es lograr que la gente entienda que no se hace contra nadie, sino gestionando equipos. Hay un rodaje, se va encajando poco a poco.

–Su deseo de cambios genera malestar. Guipúzcoa está en rebeldía.

–Son situaciones previas a la elección de candidatos, es normal. Pero ese malestar trasladado a través de los medios no se ha hecho en los órganos de dirección del partido. Hay personas que prefieren ir a la prensa antes.

–¿No se le ha pedido abrir la decisión a las bases, sin dedazos?

–Hay que ser serios. Los estatutos del PP no recogen esos procesos participativos. Uno no puede sacarse unas primarias de la manga cuando hay que elegir candidatos al doblar la esquina.

–Estoy abierta. Por supuesto, creo que nuestro partido debe mejorar los cauces participativos. Pero hoy por hoy es el comité electoral provincial quien propone y, en el caso de las capitales, es el comité nacional quien elige.

–Génova normalmente avala…

–O no. Necesitamos perfiles con vistas a cuatro años, alguien que acredite liderazgo, no solo un cartel electoral.

–¿Y no lo tiene ahora el PP?

–Sí, claro.

–Pero extiende esa duda…

–El PP vasco necesita sumar nuevas personas. La participación está muy bien, pero lo que tiene que cambiar en política es que cada uno no se crea dueño de la silla. Que tengan claro que aquí no hay cotos ni dedazos ni designaciones divinas, porque no hay sillas.

–¿Quiere gente nueva en las listas?

–Es lo que hay que hacer. En 1995 entramos una hornada de jóvenes, era muy difícil porque ponías en riesgo tu vida. Ahora tenemos la oportunidad de volver a contactar, ilusionar a la gente para que se involucre en política. No será de la noche a la mañana.

–¿Qué candidato busca el PP en Bilbao, ahora sin el invencible Azkuna?

–Un bilbaíno, que conozca el sitio donde está, capaz de liderar los equipos. Está claro que Azkuna arrastraba voto del PP y se abre un escenario nuevo para recuperar nuestro voto.

–El Euskobarómetro da al PP como el peor valorado entre sus votantes.

– Lógico. Euskadi no es una isla. El PP tiene un hándicap, aparte de la dureza de las medidas que nos pasan factura, también la corrupción. Nuestros votantes necesitan motivos para votarnos. Si tú no cambias todo y te presentas exactamente igual que hasta ahora, ¿qué motivos les das?

–Hablando de corrupción, la UDEF afirma que el PP financió ilegalmente la sede de Bilbao. ¿No le consta?

– Si yo tuviera esa constancia estaría ya en la Fiscalía. Nosotros miramos cómo se pagó ese crédito y comprobamos que se pagó todo. A las personas que he preguntado no me han dado ningún dato sospechoso.

–Podemos ha alterado el tablero político nacional. ¿Qué se juega España en estas municipales?

–Está en juego la senda económica que el Gobierno de Mariano Rajoy abrió y que, es evidente, trae resultados.

–¿Usted lo nota en su entorno?

–Desde luego, la situación es mejor que hace tres años. A todos nos gustaría que la recuperación fuera más rápida y eficaz. Pero nos jugamos seguir por ese camino de estabilidad. De ir a situaciones que son absolutamente desconocidas y de riesgo, que no sabemos a dónde nos llevan.

–Pues ese «discurso del miedo» no funcionó con Bildu. ¿No cree que es una estrategia fallida?

–Pero tienes que ir a los datos. Bildu es consciente de que no podía ponerlo todo patas arriba, porque su vocación es ganar el Gobierno vasco al PNV. Es un camino de largo recorrido. Y no o ha querido quemar todas las naves.. Pero los efectos en la economía sonn evidentes. Y el responsable es el PNV que les ha dejado gobernar. Ahora les echa en cara que se han ido empresarios… Los ciudadanos son maduros y saben lo que suponen los populismos…

Es verdad que España tiene que evolucionar. Yo soy partidaria de abrir determinados debates de participación ciudadana en la política. Darle una vuelta. Pero tiene que ser con sentido de Estado, con consensos. No se trata de abrir melones porque sí. Y creo sinceramente que el Rey Felipe VI puede arbitrar muy bien, puede jugar un papel muy importante en llevar a una nueva modernización de España.

–¿Ve al PNV participando en una reforma constitucional?

–Estará o no en función de lo que pueda sacar de tajada. Si su proyecto se puede ver reflejado, sí estará. Porque ellos no construyen España, cuando todos sabemos que España es un proyecto vasco. Por eso están encantandos con propuestas como la del PSOE, el federalismo asimétrico, porque ahí entran. Pero yo creo que esa parte, la territorial, es la única que garantiza la pluralidad de España. Hay otra parte que sí necesita una reforma.

–¿Cuál?

–La democracia se sustentó sobre un poder de los partidos que está en todo y eso hay que ir poco a poco soltando. Para poner al frente de instituciones a profesionales independientes que se puedan elegir de otra manera. Acabar con el reparto de poder entre partidos.

–¿Por ejemplo?

–Pues hay organismos que al final ves que hay un reparto político, porque se estableció así. Porque era para garantizar una estabilidad para que la democracia se fuera asentando.

–Plantea que los partidos cedan mayor espacio a la sociedad civil.

–Claro. Y luego también que, a la hora de elegir a los candidatos, puedas ir a las listas abiertas, que pueden ser mixto. Pero con responsabilidad.

–El PNV prometió votar en 2015 un nuevo estatus en una consulta. Pero Urkullu no parece tener prisa.

–Los plazos están claros. El PNV está ahora quieto porque necesita llegar a las municipales. Habrá una propuesta en función de qué Gobierno salga de las nacionales. Pisarán el acelerador si es débil. El problema de Urkullu es que sabe que la realidad se impone, que vamos a un mundo de integración, de correlación… Y se ha sacado de la manga un estatus que pide la independencia pero dentro de España.

–Eso no hay quien lo entienda. ¿Independencia sin salirse de España?

–Porque se han dado cuenta de que hoy por hoy en nacionalismo está abocado al fracaso. No se puede sostener en el mundo global. Por eso digo que el PP tiene una gran oportunidad, porque nuestro proyecto es el que mejor encaja en el escenario mundial. No buscamos desgajarnos, sino formar parte de estructuras mayores. Hay que combinarlo siendo los que mejor representamos los intereses de los vascos. Pero no se nos ve así.

–¿Y eso a qué lo achaca?

–Muchas veces a nuestra propia actitud, y porque desde el Gobierno de España se busca una interlocución prioritaria con el PNV. Eso también es un hándicap que debemos sobrellevar.

–¿Plantea cortar esa vía prefente?

–No. Entiendo que debe de haber esa comunicación institucional. Pero no podemos dejar que el PNV nos busque poner siempre en un rincón.

–Mitad de legislatura ¿Qué nota le da al Gobierno Urkullu?

–Le doy un cuatro, no por méritos propios, sino por el engranaje administrativo que funciona por sí mismo. Este lendakari se caracteriza por no sacar el barco a la tempestad, que ni el viento lo toque. Intenta que este momento de crisis no le desgaste.

–¿Entiende esa premura judicial para excarcelar a los presos de ETA?

–Inexplicable. Después del esfuerzo que ha supuesto la lucha contra el terrorismo, la sociedad española no se merece esto. No se entiende que estas personas no cumplan su condena. Me gustaría que los jueces lo explicaran.

–¿Tendría miedo de compartir portal con «Santi Potros»? ¿De verdad cree que la sociedad vasca le ve como un héroe o como un simple criminal?

–No me gustaría… ¿Héroe? La realidad es que, más allá de su entorno que tiene que mantener el espíritu vivo, el resto no quiere tenerlo ni de vecino.

Entrevista a ARANTZA QUIROGA – Presidenta del PP vasco, ABC – 29/12/14