‘Santi Potros’ no volverá a prisión hasta que el Supremo revise su excarcelación

EL CORREO – 15/01/15

· Sin descontar los años en Francia, le quedarían, como a Plazaola, diez años de condena por cumplir.

· El ministro del Interior presiona para que sea la Audiencia Nacional la que ordene su vuelta a la cárcel.

‘Santi Potros’, excarcelado en diciembre tras una nueva liquidación de su condena, no volverá de forma inmediata a la cárcel, pese al criterio fijado por el Supremo de no descontar a los presos de ETA los años cumplidos en Francia. La Fiscalía de la Audiencia Nacional debe esperar ahora a que el alto tribunal resuelva los recursos presentados contra las excarcelaciones de Santiago Arrozpide Sarasola, considerado el inductor del atentado perpetrado contra Hipercor en 1987, y de Alberto Plazaola para decidir si pide el reingreso de ambos en prisión.

Según fuentes del Ministerio Público, la vuelta a la cárcel de ambos exreclusos no será automática. ‘Santi Potros’ y Plazaola salieron el pasado 4 de diciembre de los centros penitenciarios de Villena (Alicante) y de Teixeiro (La Coruña), después de que la Sección Primera de Audiencia Nacional ordenara su puesta en libertad al defender la tesis de que los años cumplidos en Francia deben descontarse de las penas en España. El antiguo jefe militar de ETA y cerebro de la bomba contra Hipercor que provocó la muerte de 21 personas finalizaba su condena el 24 de septiembre de 2025, mientras que Plazaola, condenado en 1997 a 46 años de cárcel como miembro del ‘comando Araba’ por ser el autor de dos delitos de asesinato frustrado y de uno de estragos, tenía fijado el licenciamiento en 2026. Les quedaría, por tanto, aún diez años de reclusión por cumplir.

Fuentes de la Fiscalía que dirige Javier Zaragoza señalaron a Europa Press que la decisión del alto tribunal afecta exclusivamente a Kepa Pikabea y que es necesario que el Supremo se pronuncie expresamente sobre los casos concretos de ‘ Santi Potros ‘ y Plazaola.

En una primera fase, debe resolver si revoca los autos de la Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional que acordaron la excarcelación de ambos. Si el alto tribunal adopta esa decisión, la Sala tendrá que solicitar a Instituciones Penitenciarias la elaboración de una nueva liquidación de sus condenas para que los dos vuelvan a ingresar en prisión y poder completar así sus condenas.

La libertad decretada para Arrozpide Sarasola y Plazaola a comienzos de diciembre les permite contar con libertad de movimientos por toda la Unión Europea. Podrían así viajar al extranjero o, incluso, salir fuera de las fronteras de la UE. Al menos hasta que el Supremo tome una decisión definitiva

Sobre este extremo se pronunció ayer el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz. Entrevistado en Radio Nacional, se mostró a favor de que sea la propia Audiencia Nacional la que dicte el reingreso en prisión de los dos antiguos terroristas. No obstante, advirtió que esa es una decisión que deben tomar los jueces y en la que el Gobierno no se puede inmiscuir.

‘Pakito’ y Caride Simón

Los de ‘Santi Potros’ y Plazaola no son los únicos casos pendientes de revisar por el Supremo. El alto tribunal también tiene sobre la mesa los expedientes de Francisco Mujika Garmendia ‘Pakito’ y de Rafa Caride Simón, a los que se les concedió que descontaran sus años de cárcel en Francia, aunque eso no supusiera su salida aún de prisión. Caride Simón, otro de los condenados por el atentado de Hipercor en Barcelona, es el único de los cuatro que se ha acogido a la ‘vía Nanclares’ tras desmarcarse de la violencia y de su vinculación con la organización terrorista.

La Sala de lo Penal del Supremo trasladará previsiblemente el criterio fijado el martes pasado para Pikabea a estos cuatro miembros de ETA y a los otros 56 internos que han pedido que se les reste el periodo de internamiento en centros penitenciarios galos. Tras la decisión del Supremo, los afectados pueden recurrir primero al Constitucional y luego al Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo, un camino que ya se tomó con la ‘doctrina Parot’.

EL CORREO – 15/01/15