Silbidos al himno

ANTONIO BURGOS, ABC – 11/03/15

· Qué mala suerte. Final de la Copa del Rey de España entre los equipos más representativos de dos regiones que no quieren ser España.

Perdonen que al Barcelona le llame Barcelona y no le diga Barsa. No lo conozco de nada y no tengo confianza alguna con él como para llamarlo Barsa. Como no sé que familiaridad se traen y a qué colegio habrán ido juntos quienes llaman «Juanma» al excelentísimo señor don Juan Manuel Moreno Bonilla, candidato del PP a la Presidencia del Régimen Andaluz, digo, de la Junta. Señor Moreno que por cierto consiguió antier noche que a Susana Díaz le saliera la Isabel Pantoja que lleva dentro, en el debate preparado por la televisión que es el No-Do del mencionado Régimen. La gestante Susana Díaz hablaba de «mí» presidencia (acentuando mucho el «mí») como Isabel Pantoja de «mí» finca al referirse a «Cantora». Quizá haya razón: total, la Junta es el cortijo que sin pagar derechos de sucesión le dejaron en herencia, a lo Paquirri, dos imputados por el Supremo: Chaves y Griñán.

Pero íbamos por el Barcelona, alias Barsa, que va a jugar la final de la Copa de Su Majestad el Rey contra el Atlético de Bilbao. Otro equipo con el que no tengo confianza para llamarle, como hacen tantos, con ese cariñoso apodo familiar de Athletic Club (por no mentarlo en español, claro). Desde luego que ya es mala suerte. Con la de equipos que hay en las divisiones españolas de fútbol, estando ahí mi Betis, que le cae simpático ya otra vez a todo el mundo desde que se fue Lopera; y estando el Real Madrid, que es como la Marca España con forasteros importados por millonadas, pero metiendo muchos goles… Estando ahí mi submarino amarillo, mi Cádiz de mis disgustos; y estando ahí el histórico y primitivo Recreativo de Huelva, qué mala suerte… Final de la Copa del Rey de España entre los equipos más representativos de dos regiones que no quieren ser España y mucho menos aceptan al Rey. Y es más insólito todavía lo que ahora se debate en el solar patrio: ¿qué va a pasar cuando en la final, en presencia del Rey que da nombre a la Copa, suene el Himno Nacional, mote constitucional que le pusieron a nuestra sentida, vieja y querida Marcha Real? Pues algo insólito: que España se silbará a sí misma el Himno que la representa. Como el que dice: «¡Me cago en mi padre!».

Quieran o no quieran, y aunque lo silben, lo abucheen y se queden roncos armando ruido para evitar que escucharse pueda con el respeto debido, ese Himno es el de los seguidores del Barcelona y del Atlético de Bilbao, porque es de España. ¿Se imaginan a los franceses abucheando a la Marsellesa? ¿Se imaginan a los ingleses repartiendo pitos para cuando suene el «God save the Queen»? Lo de los americanos silbando a su himno es que ni me lo imagino, pues cuando suena allí hasta se militariza la sociedad civil. Sí, los americanos, por respeto a sus símbolos patrios, hasta han inventado el cuadrarse no por lo militar, sino por lo civil: firmes y con la mano al pecho. Aquí si alguien se lleva la mano al pecho cuando suene la Marcha Real en la final de Copa será para comprobar que en la bulla de la entrada no le han quitado la cartera.

Hay quien recoge firmas para pedir a la Federación que se suspenda el partido y que no se juegue la final si al sonar el Himno se escuchan esas «muestras de desagrado», como eufemísticamente llamaban los cronistas taurinos sobrecogedores a las grandes broncas a los diestros de los que habían trincado la correspondiente morterada. Dicen que tal suspensión es lo que han hecho en Francia en ocasiones semejantes. Habría algo más fácil: que previamente dejaran jugar la competición de la Copa del Rey de España solamente a los equipos de las tierras patrias que siguen queriendo ser España y que se rompen las manos aplaudiendo al Himno cuando acaba. Himno que dicen que no tiene letra, cuando hay dos: la de Marquina y la de Pemán. Sin letra y, encima, ahora con la letra de los incomprensibles renglones torcidos de los silbidos. Puestos así, que no se celebre la final y que se jueguen la Copa a los chinos. Total, para lo que creen los dos en la Copa, en el Rey y en España…

ANTONIO BURGOS, ABC – 11/03/15