Entrevista JAVIER RUPÉREZ – ABC – 06/03/16
· El embajador insiste en que «estos actos fallidos son malos para el sistema».
El embajador Javier Rupérez ha asegurado en «Herrera en COPE» que en el escenario político actual «hay demasiada iracundia». Tras la fracasada sesión de investidura del pasado miércoles, en la que en su opinión «hubo mucho de esperpento» insiste en que «estos actos fallidos son malos para el sistema, que tiene que ser democrático pero eficaz» y recuerda que «hay que mantener el coraje de las convicciones pero respetando las opiniones contrarias».
Aunque Javier Rupérez afirma que «en España saldremos adelante», considera que los representantes del Congreso tendrían que fijarse más en otras cámaras como la británica o la americana «en la que siempre hay unas reglas de juego que no se traspasan».
Respecto a la salida de la cárcel de Arnaldo Otegi, Rupérez reconoce que «aunque en lo personal no me produce alteración, en lo diplomático y político me da repugnancia». Ha añadido que «es un criminal, los que le consideran preso político se convierten en cómplices, están cometiendo una terrible indignidad».
Sobre el apoyo que ha dado la formación liderada por Pablo Iglesias a Otegi, el embajador señala que «Podemos se ha situado fuera del marco constitucional. Es un partido pensado para destruir el sistema de libertades tal y como se conciben en el mundo democrático».
Insiste en que los «planteamientos y riñas de Podemos le recuerdan al Lenin del año 17 o a los partidos comunistas. No tienen respeto a la construcción constitucionalista» y recalca que «la principal tarea que tenemos que realizar es convencer a esos 5 millones de votantes de Podemos para que vuelvan al carril democrático, no porque sea la casta sino la salvaguardia de las libertades».
Por último, sobre las elecciones en EEUU, el diplomático vaticina que Hillary Clinton será la nueva presidenta de EEUU y critica a Trump por ser «el Iglesias de Norteamérica, la imagen del populismo. Gente que no tiene ninguna ideología nada más que la ocupación del poder»