ENTREVISTA

DANIEL TERCERO-ABC

  • El profesor, intelectual y escritor explica a ABC los motivos por los que acudirá a la manifestación, convocada por Societat Civil Catalana para este domingo, contra la amnistía del PSOE a los independentistas

El constitucionalismo catalán se activa contra la amnistía

—¿Por qué acudirá a la manifestación del domingo?

—Es un momento de una gran gravedad por el deterioro al que está sometida la vida política. Es importante recordar que si en Cataluña hay más tranquilidad que en 2017 es por la aplicación del artículo 155 de la Constitución, no por lo que dice Pedro Sánchez.

—¿Servirá para algo?

—Sí. Es importante que quede constancia que no se puede hablar en nombre de todos los catalanes si quedas el cuarto (ERC) y el quinto (Junts) en unas elecciones. La manifestación socavará el relato de que con la amnistía se intenta contentar a los catalanes.

—¿Cree que habrá referéndum?

—Los nacionalistas son sórdidos en sus objetivos y procedimientos pero son racionales, tan racionales como puede ser un delincuente a sueldo. Su mejor opción siempre será Sánchez. Es una cuestión puramente estratégica. El referéndum forma parte del pulso de la negociación. El problema es que se ha reforzado a los independentistas, que estaban contra las cuerdas tras 2017, camino de la derrota, y se ha desarmado al Estado. A esto hay que sumar la palabra de Sánchez, que ha dicho tantas veces ‘no’ a tantas cosas que luego fueron ‘sí’, que no hay razones para pensar que el referéndum esté olvidado en el PSOE.

—¿Cuál es el límite en las cesiones?

—El objetivo razonable de los independentistas no es estrictamente la independencia, sino conseguir una independencia factual protegida por la Constitución. Que los nacionalistas controlen Cataluña y decidan en Madrid. Bueno, ya está pasando. Cataluña está fuera de los códigos morales y legales convencionales. La impunidad se da como situación de facto.

—¿Debería haber un pacto PP-PSOE?

Es el momento de una junta democrática. Un acuerdo transversal para instaurar el marco democrático efectivo en España. Pero el PSOE ha emponzoñado a los españoles. Cuando uno ha hecho un camino de vuelta y se ha tragado tantas ruedas de molino, ya no las escupe, porque es ir contra su biografía. El PSOE no tiene solución. El mayor daño desde la transición es pensar que «hay que dar algo» a los nacionalistas. Esto también lo comparte el PP. Mientras siga este marco mental, no hay nada que hacer.