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Ante la emergencia sanitaria, el Gobierno está haciendo lo que debe hacer, a pesar de algunos patinazos, y será necesario que tenga amplitud de miras para alcanzar pactos de Estado porque lo que se avecina es catastrófico.
Éste fue el análisis básico del excoordinador federal de Izquierda Unida, Julio Anguita, en La Sexta Noche sobre la gestión que está realizando el Ejecutivo de Pedro Sánchez y la oposición para frenar los efectos de la epidemia de coronavirus que está asolando todo el mundo.
Anguita aseguró, en tono apocalíptico, que no ha «conocido un problema de tal intensidad, tan gordo«, y apuntó que tenemos «expectativas de extraordinaria dificultad» y que por ello «la sociedad tendrá que prepararse».
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«Por lo que yo puedo ver, y teniendo en cuenta otras épocas a lo largo de la historia, esta vez los ministros salen y dan la cara», aseguró el exdirigente de IU, que ha añadido: «Veo que se toman medidas, con todos los fallos por la falta de previsión, pero están acudiendo a todos los problemas, están responsabilizándose». Anguita destacó que «hay alguien que está gobernando y que está tomando las riendas».
Pactar pero sin exclusiones
Sobre los pactos de Estado que se prevén alcanzar para contrarrestar los efectos de la crisis, Anguita recordó que él ha vivido los Pactos de la Moncloa, que se hicieron «en un momento en el que la dictadura había acabado. Seguía, no formalmente, pero sí en los poderes económicos, políticos…».
En ese momento, prosiguió el exlíder de IU, «había que intentar llegar a una Constitución», pero aclaró, con mensaje directo a Moncloa: «Había cosas distintas. Allí no se excluyó a nadie. Ahora hay indicios de que se intenta excluir a determinadas fuerzas políticas». dijo en clara y sorprendente alusión a VOX..
«En consecuencia, hoy, cuando se habla de pactos, ¿quién se va a oponer a que haya un acuerdo de todas las fuerzas ante esta situación?», continuó Anguita, que puso el acento en la necesidad de especificar el reparto de responsabilidades que, a su entender, se debe dar a nivel socieconómico:
«Un pacto, por la experiencia de uno, significa que alguien tiene que apretarse cinturón, y hay gente que no tiene ya ni cinturón, que son los precarios. A estos no se les pide lo que no pueden dar».
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En esta línea, el exlíder político pidió hablar de objetivos claros y sus consecuencias: «Si tocamos los salarios directos, por lo menos que sea para que tengan educación pública, sanidad pública, transporte, energía o vivienda”.
Reclamó, por último, que se observen «las posibilidades de que esos pactos incluyan un cambio» para que no se repitan estas circunstancias: «Pero no hablo solo de pandemia, hablo de problemas derivados del cambio climático. Tenemos delante expectativas de extraordinaria dificultad. Y esta sociedad tendrá que prepararse».