El consejero vasco de Interior corta de raíz posibles especulaciones y explica que respaldará a los populares por ser la lista más votada
Esta vez, sí. Esta vez no habrá lugar a rumores ni rifirrafes entre las dos principales fuerzas constitucionalistas en Álava, ya que el PSE, como era esperado, respaldará al PP tanto en el Ayuntamiento de Vitoria como en la Diputación por ser la lista más votada el pasado 22 de mayo. «Le apoyaremos al PP en Vitoria y si depende de nuestros votos, también al candidato en Álava para que sea diputado general», recalcó ayer el consejero vasco de Interior y secretario de Política del PSE, Rodolfo Ares, quien matizó, no obstante, que en lo referente a las Juntas Generales «no es suficiente con nuestro apoyo» porque PP y PSE solo suman 25 escaños, uno menos que la mayoría absoluta necesaria y que por contra sí podría alcanzar el PNV gracias a los votos de Bildu y EB.
Con sus declaraciones, Ares quiso cortar de raíz todas las especulaciones surgidas en torno al sentido del voto del PSE y una posible presentación de la candidatura del todavía alcalde en funciones, Patxi Lazcoz. No habrá sorpresas. Javier Maroto, candidato más votado con 9 concejales, será investido alcalde el próximo día 11. La única opción de que no lo sea es que PSE, PNV y Bildu unan sus fuerzas para desbancar al PP, algo imposible a tenor de lo dicho por Ares. Aunque el consejero habló de «apoyar», el entorno de Lazcoz matizó que aún no está decidido si darán el sí o se abstendrán, dos fórmulas válidas para que Maroto sea alcalde.
Caso diferente es el de las Juntas Generales, donde el descalabro del socialista Txarli Prieto ha provocado que las dos grandes fuerzas constitucionalistas hayan perdido la mayoría absoluta de la Cámara. El PP, como en 2007, ha sido la fuerza más votadas (ha subido de 15 a 16 junteros) y el PSE, por contra, ha caída de 14 a solo 9. «En lo que depende de nosotros, tendrá nuestro apoyo para que sea diputado general. El problema es que no es suficiente con nuestro respaldo», apostilló Ares en una entrevista con Onda Cero. Aquí, no ha lugar a la abstención, el voto afirmativo es imprescindible para mantener el pulso entre PP y PSE (25) frente a PNV y Bildu (24), a la espera de que EB (2) decante el sentido de su voto.
LAS REACCIONES
RODOLFO ARES | SECRETARIO DE POLÍTICA DEL PSE
«Apoyaremos al PP en las Juntas Generales, pero el que sea diputado general no depende de nuestros votos»
LORENA LÓPEZ DE LACALLE | PORTAVOZ DE BILDU
«Nuestro apoyo al PNV para que Agirre sea diputado general comienza y termina en la sesión de investidura»
|
La maniobra del PSE vasco no es causal. El malestar con los resultados cosechados en Álava, con caídas de hasta el 39% respecto a 2007, es elocuente, de ahí que hayan decidido tomar la batuta y atajar polémicas como las vividas hace dos años, cuando Txarli Prieto, secretario general de los socialistas alaveses, consiguió frenar en la Diputación la moción de censura exigida por el PP como contrapartida por su apoyo al lehendakari López. Ahora, con la figura de Prieto en entredicho, todo será diferente.
Sea como fuere, el escenario alavés ya empieza a esclarecerse. Porque si Ares confirmó ayer el apoyo del PSE al PP, Bildu hizo lo propio con Xabier Agirre en la Diputación. La coalición abertzale ya lo anunció a las 72 horas de la cita con las urnas. «apoyaremos al PNV sin condiciones ni contrapartidas». Y lo harán, como explicó una de sus portavoces en Álava Lorena López de Lacalle, «para apartar del camino al PP por negarse a avanzar hacia la solución del conflicto político en Euskal Herria». Eso sí, recalcó que «nuestro apoyo comienza y termina en la sesión de investidura». No a gobiernos estables pero sí a acuerdos puntuales «a lo largo de la legislatura en materias como el euskera, la financiación municipal, la fiscalidad, Treviño, el medio ambiente o el feminismo».
Junta Electoral Central
Mientras tanto, la Junta Electoral Central ratificó ayer la resolución emitida por la Junta de Vitoria y desestimó el recurso presentado por el PNV alavés para que quedara anulada la mesa electoral de la localidad de Ribera Baja por irregularidades en el voto de extranjeros. La decisión no era baladí porque de haberse tenido en cuenta la reclamación, los jeltzales hubieran recuperado el escaño 14 en detrimento del PSE, que pasaría de 9 a 8, provocando un escenario en el que la suma PNV-Bildu hubiera superado en un juntero a la de PP-PSE (25 a 24), con lo que a EB le hubiera bastado con abstenerse en la sesión de investidura para impedir, como ha anunciado, que gobierne Javier de Andrés.
EL CORREO, 4/6/11