Artur Mas afirma que Cataluña está al borde del colapso por culpa de Madrid

· El Govern esperó hasta ayer, dos días después de que se celebraran las elecciones municipales, para denunciar públicamente que la Generalitat atraviesa por unos problemas de tesorería «extremos», que atribuyó a una estrategia estudiada del Gobierno para «asfixiar» económicamente a Cataluña.

Las primeras consecuencias de esta crisis se verán en cuestión de días. Según el portavoz del Govern, Francesc Homs, todos los departamentos de la Generalitat tendrán «problemas generalizados» para afrontar pagos a proveedores durante los próximos dos meses. El también conseller de Presidencia descartó que la situación vaya a afectar también a las nóminas de los trabajadores de la Generalitat. «Eso parece estar salvado», afirmó.

Fuentes de la Consejería de Economía consultadas por este diario atribuyeron ayer la crisis a los 2.300 millones que el Govern esperaba ingresar del Ministerio de Hacienda en 2014 a cuenta del Tesoro. El máximo responsable de las finanzas catalanas, el conseller Andreu Mas-Colell, está tratando esta semana de llegar a un acuerdo con el Ministerio que dirige Cristóbal Montoro. El Govern, sin embargo, asume que las gestiones no fructificarán y ya ha convocado para la próxima semana a los partidos en el Parlament de Catalunya para detallarles con exactitud lo que Homs describió como «una situación muy dramática».

Hasta que los impagos lleguen a ser oficiales, el Govern tiene previsto salvar el mes actual a través de lo recaudado con impuestos. Unos fondos que irán destinados a pagar a las farmacias –que acumulan una deuda de la Administración de 220 millones de euros–, los conciertos sociales y las ayudas a la dependencia, también con graves atrasos. Solventadas esas prioridades, la falta de fondos se trasladará a todos los departamentos «sin excepción», dijo Homs. El Govern eludió ayer concretar la cifra que acumulará cada uno de los Departamentos ni tampoco cuáles serán los proveedores afectados.

El Ejecutivo que dirige Artur Mas aprovechó ayer la ocasión para atacar también a la probable futura alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, a la que acusó de formar una «pinza diabólica» con Mariano Rajoy para ahogar económicamente a la Generalitat. El portavoz del Govern no mencionó el nombre de Colau en ningún momento durante su rueda de prensa. Sin embargo, aludió en reiteradas ocasiones a «quien acusa al Govern de no pagar sus deudas». Colau ha reclamado en muchas ocasiones a Mas que devuelva al Ayuntamiento de Barcelona el dinero que el alcalde saliente, Xavier Trias, le ha prestado durante su mandato y que oficialmente asciende a 148 millones. Los partidos de la oposición elevan la cifra hasta los 300 millones.

El anuncio sobre la situación «verdaderamente delicada» de la Tesorería de la Generalitat coincidió, ayer, con el primer día de la campaña institucional para promocionar las elecciones del 27-S, que tiene un coste de 1,3 millones. Una situación que disparó las críticas de PSC, PP y Ciutadans, los cuales denunciaron la contradicción entre la falta de liquidez y el dinero destinado a una campaña de «propaganda». El Govern tachó a quienes sostienen esa tesis de «populistas» y de «hacerle la campaña al Gobierno del PP».

«Una alianza social y política»

Es lo que pretende formar Podemos en Cataluña para disputarle la Generalitat a CiU, según explicó ayer la secretaria general de este partido, Gemma Ubasart, que no descarta la presencia de otras formaciones en el proyecto, como ICV, o de plataformas ciudadanas. De hecho, el objetivo es crear una candidatura similar a la liderada por Ada Colau en Barcelona, que ha conseguido alzarse como la fuerza más votada en los comicios del domingo.

No obstante, Ubasart destacó que este modelo no es aplicable en su totalidad a otros escenarios políticos, ya que cada cual tiene sus particularidades. Por eso reconoció la importancia de los «liderazgos sociales» para aspirar a gobernar las instituciones. «La propuesta para las elecciones catalanas puede ser similar o diferente a la de Barcelona en Comú», ha explicado la secretaria general de Podemos en Cataluña quien ha añadido que su intención es «articular una candidatura amplia, con una alianza social y política» adaptada a una realidad política concreta.

«Buscamos liderazgos sociales que hagan posible que gane la democracia», destacó Ubasart e indicó que en las próximas elecciones autonómicas tendrá más peso la cuestión social que la nacionalista ya que el electorado deberá escoger entre dos modelos de hacer política: el «de los de arriba, la austeridad y la corrupción» de CiU, o el de «la Cataluña de la democracia con más derechos sociales en las instituciones».

Ubasart recordó que su formación apuesta por el derecho a la autodeterminación y que trabajará para hacerlo posible en el entorno adecuado. Incluso destacó que Podemos se mueve dentro «del marco democrático» y «respeta el derecho a la autodeterminación como el 85% de la población catalana, a partir de ahí establecemos diálogos constructivos».

Ante esta propuesta, la portavoz parlamentaria de ICV-EUiA, Dolors Camats, destacó que la victoria de Ada Colau en Barcelona es una muestra de la capacidad de la izquierda para construir una «alternativa» a CiU, por lo que destacó los «diagnósticos compartidos» y los «objetivos comunes» que tienen con Podemos.

EL MUNDO – 27/05/15