Marta Ley-El Confidencial
- El actual presidente no ha dejado de sumar apoyos desde que se conoció el resultado de la primera vuelta, pero los últimos días las encuestas han paralizado esa subida
El presidente francés y candidato a la reelección, Emmanuel Macron, continúa con una ventaja cercana a los 12 puntos sobre su rival, Marine Le Pen, de cara a la segunda vuelta de las elecciones francesas, que tendrá lugar el próximo domingo. Desde que se conocieron los resultados de la primera votación, el líder de La République En Marche ha visto cómo sus opciones crecían día a día, pero las encuestas publicadas entre ayer y hoy trasladan que esa subida sostenida está tocando techo a la espera de las consecuencias del único debate presidencial.
La casa encuestadora Ipsos elabora un ‘traqueo’ diario de sondeos, y sus resultados han ofrecido cifras idénticas para Macron y Le Pen en los últimos dos días: 56,5% y 43,5%, respectivamente. Lo mismo sucede con Opinion Way, otra de las empresas que están preguntando a diario a los franceses para conocer qué candidato tiene más opciones de ganar. Tanto el martes como el miércoles otorgaban a Macron una victoria con el 56% de los votos frente al 44% de la candidata de Agrupación Nacional.
Con todo, la media de los últimos siete días de las encuestas publicadas continúa mostrando una tendencia de crecimiento para Macron. Esto se explica porque su posición sí que ha mejorado en la última semana: desde el día 11, tras la votación de primera ronda, sus opciones de ganar han crecido cerca de tres puntos. Sin embargo, hay que tener en cuenta que los sondeos son más fidedignos cuanto más próxima sea la fecha de las elecciones, y los datos difundidos desde principios de esta semana reflejan signos de estancamiento en las posiciones. El debate electoral puede ser un revulsivo para la quietud de las encuestas en los últimos días, pero para conocer los efectos del mismo sobre las decisiones de los franceses habrá que esperar al menos hasta el viernes.
La última encuesta de Ipsos muestra también una ligera subida de los apoyos a Le Pen entre los electores de Mélenchon. La empresa llevaba varios días calculando que un 16% de los votantes del candidato de La Francia Insumisa la apoyarán en segunda vuelta, mientras que la última cifra publicada eleva ese porcentaje al 17%. Con todo, Ipsos está entre las casas encuestadoras que menos apoyo otorgan a Le Pen entre los ‘insumisos’. El 39% de estos votantes prefiere a Macron antes que a Le Pen y un 44% prefiere no pronunciarse o no irá a votar. Hasta la fecha, Mélenchon no ha pedido el voto de los suyos para el candidato de La République En Marche.
Otra de las cuestiones que aborda el sondeo de Ipsos gira en torno a la principal motivación de los que no votaron a Macron ni a Le Pen en la primera vuelta para elegirles en la segunda. Y las opciones son dos: porque creen que será un buen presidente o presidenta o para frenar a su adversario. Los votantes de Mélenchon, los ecologistas de Jadot o la derecha republicana de Pécresse, que prefieren la victoria de Macron, le votarán principalmente para evitar que Le Pen llegue al Elíseo. Y, sin embargo, la justificación de aquellos que votarán en segunda vuelta a Le Pen no es tanto frenar a Macron como que consideran que Le Pen puede ser una buena presidenta. El 22% de todos los encuestados no responde aduciendo que ninguno de los candidatos es de su agrado.
Para la mayoría de los franceses, la victoria de Macron es la opción más probable, siguiendo a Ipsos. En concreto, el 67% piensa que el actual presidente repetirá mandato, al margen de cuáles sean sus preferencias. Un 17% opina que ganará Le Pen y el 22% restante ha respondido que ‘no sabe’. Incluso entre los votantes de Le Pen, los más optimistas respecto a su posible victoria, solo la mitad apuesta a que ganará ella, por encima, eso sí, del 34% que opina que Macron se hará con la victoria. Pero el presidente no se fía, como dejó ver en su primer discurso tras vencer con claridad en primera ronda y saber quién sería su rival el próximo domingo: «No nos equivoquemos. Nada está decidido».