EL CORREO 20/11/13
· Deniega la extradición de Natividad Jauregi, relacionada con seis asesinatos en 1981, al haber transcurrido más de treinta años desde la comisión de los delitos
El Tribunal de Casación, última instancia de recurso en Bélgica, decretó ayer la puesta en libertad de la presunta etarra Natividad Jauregi, tras rechazar su extradición a España. «Jauregi será puesta en libertad esta noche y el procedimiento de entrega a las autoridades españolas termina aquí», anunció ayer a Efe la portavoz de la Fiscalía belga, Lieve Pellens.
Natividad Jauregi, alias ‘Pepona’, estaba huida desde 1979. Fue detenida el pasado 8 de octubre en Gante por agentes de la Policía Judicial de Bélgica , en colaboración con la Policía y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) españoles. Sobre ella pesaban dos órdenes europeas de detención por asesinato y terrorismo, por su supuesta implicación como miembro del ‘comando Bizkaia’ en la muerte de seis agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en 1981. También tenía pendiente una orden de búsqueda, detención e ingreso en prisión por un delito de atentado contra la autoridad.
El Tribunal de Casación dio ayer por buena la decisión de un juzgado de apelaciones de Gante, que había denegado el pasado 31 de octubre la entrega de Jauregi a España, en contra de lo establecido de entrada por la Justicia belga.
El abogado de Jauregi había alegado ante el juez que se había superado el «plazo razonable» que exige la normativa para la extradición, al haber transcurrido 32 años desde que se cometieron esos delitos. La Fiscalía federal recurrió el caso y lo llevó ante el Tribunal de Casación, el equivalente al Supremo español, que finalmente decidió ayer desestimar su petición y liberar a la presunta etarra. El fallo hace definitiva la decisión del juzgado de Gante, según precisó Pellens.
La audiencia de la presunta terrorista se tuvo que posponer ayer durante unas horas por un aviso de bomba que obligó por la mañana a evacuar la sede del tribunal. Interior relaciona a Jauregi con los asesinatos en 1981 de un subcomisario y un teniente coronel del Ejército en Deusto, así como de un policía en un ataque a un convoy en el túnel de Begoña, en Bilbao, dos guardias civiles en una explosión en Lemoa y un teniente de Artillería, ametrallado en Barakaldo.