ABC 13/07/13
· Los tres ediles de la coalición proetarra se ausentan un año más del acto en Ermua.
Ni están ni se les espera, al menos hasta que no condenen la historia criminal de ETA y reconozcan su responsabilidad de haber concedido aliento ideológico a la banda durante décadas de terror. Bildu volvió ayer a ausentarse del homenaje que el Ayuntamiento de Ermua, en Vizcaya, brinda a su hijo más sentido, Miguel Ángel Blanco, cada año. La coalición que cobija a la vieja Batasuna demostró una vez más su desprecio al clamor político y social que el secuestro y brutal asesinato del joven concejal del PP despertó en las conciencias de la sociedad vasca y española, que dijeron «¡Basta ya!». Era julio de 1997 y el «espíritu de Ermua» se activó contra la barbarie etarra y sus colaboradores políticos.
16 años sin Miguel Ángel
Dieciséis años después, su condición de legales, otra vez en las instituciones, no les ha llegado acompañada de la «madurez» democrática necesaria para condenar la pérdida de vidas humanas a manos de ETA y exigir de paso a la banda que desaparezca. Así se lo recordó ayer el alcalde de Ermua, el socialista Carlos Totorika, quien ya ocupaba el cargo en aquel trágico verano de velatorio eterno en la calle y miles de manos blancas unidas en toda España.
Tras una sencilla ofrenda floral ante el busto de Miguel Ángel dentro del consistorio vizcaíno, Totorika tomó la palabra para denunciar la cobardía de los tres ediles de Bildu, los únicos ausentes cada año. A ellos les pidió que condenen la historia criminal de ETA, algo a lo que ya se negaron cuando el PP promovió al comienzo de esta legislatura una moción en los pueblos vascos. Mientras el resto de grupos – PSE, PP y PNV, y la ausencia excusada del representante de Izquierda Unida- guardaban un minuto de silencio, Bildu volvió a incurrir en la humillación de la memoria de Miguel Ángel, y de todas las víctimas de ETA. Bastaba echar una ojeada en la web de la coalición radical en Ermua para ver sus prioridades. En su última entrada, convocaban a la ciudadanía a asistir al Pleno municipal, del pasado 27 de junio, para tratar «temas importantes»: los presupuestos y las «txosnas» o casetas de feria. Por supuesto, ni rastro del recordatorio de Blanco, que ayer motivó que el Ayuntamiento amaneciera con todas sus banderas a media asta, informa Efe.
El PP vasco, con su presidenta, Arantza Quiroga, al frente, realizará hoy otro homenaje particular al joven edil, al que asistirá su hermana, Mari Mar Blanco, presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo.
«Tienen que madurar y reconocer el terror de ETA»
El alcalde socialista de Ermua, Carlos Totorika, ocupaba ya en aquel fatídico verano de 1997 el balcón consistorial, desde donde transmitió a toda España que el joven edil popular, Miguel Ángel, había sido vilmente asesinado tras dos días de chantaje a los demócratas. Dieciséis años después, Totorika volvió a encender las conciencias, en este caso de los tres concejales de Bildu que hoy se sientan en el mismo ayuntamiento de Blanco, al exigir una lectura crítica del pasado de connivencia con el terror. «Bildu tiene que madurar, tiene que reconocer que el fin de ETA requiere que condenen la violencia, el terror y el sufrimiento que han producido durante tantos años en este pueblo».
«Si no condenan antes, que venga Bildu es cinismo»
A ninguno de los concejales del PP en el País Vasco le sorprende el vacío de Bildu a las víctimas de ETA en los sucesivos actos de homenaje que se repiten en la geografía municipal vasca. Fernando Lecumberri, portavoz popular en Ermua, no olvida que la coalición radical eludió la condena a la banda que su partido promovió en los municipios nada más inaugurarse la legislatura, con Batasuna de regreso a las instituciones. Ermua fue el primer ayuntamiento en aprobarlo, por su incontestable carácter simbólico. «Su ausencia hoy no nos choca, lo que sería un acto de cinismo importante es que vinieran al homenaje sin haber sido capaces antes de condenar a ETA», afirmó a ABC.
Un relato conjunto contra el «victimismo etarra»
Nuevas Generaciones del PP vasco, de las que formaba parte Miguel Ángel Blanco, reclamó ayer «un relato conjunto» de los demócratas que «haga frente al victimismo de Bildu» y desmonte su teoría del «conflicto» con dos bandos enfrentados. El presidente de la organización juvenil, David Hernández, que mañana tomará parte en el homenaje que el PP realiza junto a la familia Blanco en Ermua, aseguró que «es el momento» de construir entre PP, PSE y PNV «un relato conjunto» de lo ocurrido y que el «plan de paz» de Urkullu «sólo está sirviendo para favorecer el victimismo de Bildu». Ésa será, dijo, su mejor contribución para mantener viva la memoria de Miguel Ángel, informa Ep.
ABC 13/07/13