Bildu evitó condenar ayer los incidentes protagonizados por sus simpatizantes en Elorrio, donde el único concejal del PP dio su voto a la candidata del PNV, Ana Otadui, para que arrebatara la alcaldía a la coalición abertzale.
El secretario general de EA, Pello Urizar, aseguró ayer en respuesta a los periodistas que «la palabra condena está muy bien para ciertos ámbitos», pero evitó utilizarla en este caso. Urizar insistió en que Bildu quiere lograr en todos los municipios la normalidad por la que se caracterizó la jornada del sábado y calificó los incidentes de Elorrio y otros -como la negativa a dejar entrar a varios periodistas en el pleno de Lizarza- como «excepciones».
Con 118 alcaldes y más de 1.100 concejales, Bildu fijó en una rueda de prensa las tareas urgentes para las que se empleará a fondo: la creación de un escenario democrático para Euskadi, la legalización de Sortu y la «solución definitiva» para los presos de ETA.
A favor del acercamiento de los presos etarras se manifestaron ayer varios miles de personas en Bilbao, informa Kerman Romeo. La marcha, la primera de estas características tras el 22-M, congregó a varios miembros de la izquierda abertzale ilegalizada, como Tasio Erkizia, Txelui Moreno, Marian Beitialarrangoitia y Jone Goirizelaia, junto a representantes de Bildu, entre ellos Urizar y Niko Moreno.
EL PAÍS, 13/6/2011