Bildu ultima una campaña de presión callejera contra Barcina 28/03/2013 by fundacion / EL MUNDO 28/03/13 · Prepara actos con los «agentes sociales» y un buzoneo masivo por su moción de censura. La izquierda abertzale quiere poner toda la carne en el asador. Y su principal objetivo es Navarra y el Gobierno foralista de UPN. Quiere ganarse a toda la oposición y tumbar a Yolanda Barcina. Como ya adelantó EL MUNDO, los abertzales pretender presentar de una moción de censura contra el Ejecutivo de UPN. Y desde hace meses tratan de convencer al resto de formaciones de la oposición para que la secunden. Saben que la llave la tienen los socialistas navarros y en ellos están sembrando su presión. Y quieren trasladarla, como es su táctica habitual, también a la calle. La coalición Bildu pretende buzonear decenas de miles de pasquines por toda Navarra en los que explicarán las razones por las que intentarán convencer a toda la oposición para que voten a favor de la moción de censura contra Barcina. Y después convocará una manifestación. El silencio socialista de momento es espeso. Los pronunciamientos acerca de la iniciativa abertzale son tibios y nada definitivos. Todo apunta a que la primera semana de abril se concretará la petición abertzale. Y también que esta iniciativa, que logrará un fuerte impacto social y mediático, no llegará a término porque desde Ferraz no apoyarían un voto a favor por parte de los socialistas navarros. Pero nadie se pronuncia con claridad. Aunque lo más probable es que el PSN se defina por la abstención (que bloquearía la iniciativa abertzale) nadie lo confirma con rotundidad. En los pasquines que ultima la izquierda abertzale para su buzoneo se apunta: «Llevamos meses intentando gestar un acuerdo amplio entre toda la oposición parlamentaria con un único objetivo, presentar una moción de censura y que el/la presidente/a del Gobierno resultante convoque elecciones de manera inmediata. La situación de Navarra necesita un cambio profundo y ese debiera ser también el compromiso una vez celebradas las elecciones». El folleto, titulado Moción de censura por qué y quién, explica también que esta petición se produce porque han pasado «unos meses muy duros en los que la corrupción, el desempleo y la falta de acuerdo no han hecho posible algo tan necesario y demandado como la transformación democrática de nuestras instituciones», defiende la formación que se niega un día sí y otro también a condenar expresamente los asesinatos cometidos por ETA. Pero sí anuncia la presión social que pretende levar a cabo para forzar al Ejecutivo foralista de UPN a tirar la toalla y convocar elecciones. «Presentamos nosotros/as la moción de censura pero es una iniciativa integradora, que ambiciona ser consensuada con el resto de formaciones parlamentarias y aglutinar el mayor respaldo social posible. Esta iniciativa no es nuestra, es del conjunto de agentes sociales, sindicales, políticos y ciudadanos/as que reclamamos desde hace tiempo un cambio profundo en la realidad de Navarra», indica el texto que ha elaborado Bildu para su difusión. El pilar principal de su iniciativa es tratar de aglutinar a toda la oposición. Y el segundo, trasladar sus iniciativas de presión contra el Gobierno de Barcina a las calles. De hecho, su intención es convocar una gran manifestación en Pamplona a la que tratarán de sumar a personalidades de los diferentes sectores sociales de Navarra. Pero su gran pelea es convencer al PSN. Y un sector de los socialistas navarros no hace precisamente ascos a cualquier acercamiento con los abertzales. De hecho, durante los últimos meses se ha visto cómo el PSN apoyaba iniciativas de Bildu y actuaciones más o menos conjuntas. Así se ha visto en Egües o en Villaba. Pero recientemente estuvo con sus huestes navarras el aún líder de los socialistas Alfredo Pérez Rubalcaba. Y el mensaje que les lanzó fue claro: ni un solo guiño, gesto o votación con la izquierda abertzale. Y enmarcó su línea de actuación en sus acuerdos con el Gobierno central y el Partido Popular en política antiterrorista. Pero no está muy claro que, como ha ocurrido en otras comunidades, los socialistas navarros estén firmes en la misma línea de trabajo política de su secretario general. EL MUNDO 28/03/13