EL MUNDO 23/01/14
· CiU, ERC e ICV presentarán el 3 de febrero dos iniciativas calcadas de la del Parlament.
Los tres grupos partidarios del referéndum soberanista en Cataluña con representación en el Congreso –CiU, ERC e ICV– preparan dos iniciativas parlamentarias –y no sólo una proposición de ley, calcada de la aprobada en el Parlament catalán– con el propósito de dominar mínimamente los tiempos y de que el debate parlamentario sobre la consulta, por cualquier vía, no dependa sólo de la voluntad del PP. Éste es uno de los acuerdos que se alcanzó el martes en las reuniones bilaterales que el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, mantuvo con sus homólogos de ERC y de ICV, Alfred Bosch y Joan Coscubiela.
Aunque en principio sólo se había apuntado a la presentación de una proposición de ley, espejo de la propuesta promovida desde Cataluña, solicitando la delegación de competencias para celebrar la consulta, finalmente habrá otras dos iniciativas. Una, suscrita por los tres grupos, y otra, con la firma de 15 diputados. Según la terminología utilizada ayer por el dirigente republicano Alfred Bosch, «copias de seguridad» de la petición del Parlament. En total, tres propuestas idénticas reclamando el referéndum.
De este modo, los grupos catalanes dispondrían de instrumentos suficientes, en la configuración del orden del día de las sesiones plenarias, para poder controlar cuándo se produce en el Congreso el ansiado debate sobre la consulta.
En CiU existía cierto temor a que el PP pudiera demorar la discusión de la proposición de ley conjunta de los tres grupos, prevista para el mes de marzo, presentando otras que retrasaran la suya. Y, aunque el Grupo Popular lo que quiere es avanzar el debate sobre Cataluña todo lo posible, para alejarlo de la celebración el 11 de septiembre de la Diada, CiU, ERC e ICV no están dispuestos a aceptar que el asunto quede a merced de lo que interese al PP.
Los populares son partidarios de que el Congreso rechace cuanto antes la petición del Parlament. Pero su interés radica en esta solicitud –la verdadera– y no en los sucedáneos en forma de propuestas de los grupos catalanes en el Congreso.
Por ello, van a insistir en que elParlament retire su iniciativa sobre ejecuciones hipotecarias para que se adelante la de la consulta. Desde CiU y ERC se asegura que esta posibilidad ni siquiera se contempla. Primero, no quieren ser acusados de orillar los problemas de la gente en pro del independentismo. Y segundo, existe un compromiso con la portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, Ada Colau, una persona con gran predicamento en Cataluña. Por tanto, no habrá adelanto del debate catalán de esta manera.
Aun así, existen vías para que la petición del Parlament se solvente antes de septiembre, como pretende el PP. Pasaría por que se volvieran a retrasar dos proyectos de las Cortes Valencianas, aplazados hasta tres veces en los últimos años. Fuentes de la Mesa del Congreso admitieron ayer que se contempla esta posibilidad.
Estaríamos por tanto ante dos escenarios de debate de la misma propuesta que discurren en paralelo. Uno, la solicitud del Parlament, donde el PP puede disponer de cierto margen de maniobra si se aplazan las iniciativas de otras comunidades (hay cinco en cola). Dos, las copias de seguridad de la primera, en forma de iniciativas parlamentarias de los grupos catalanes, con las que éstos aspiran a controlar los tiempos. Estas dos proposiciones de ley serán presentadas el próximo 3 de febrero, tras la negativa de ICV a que se registraran esta misma semana. Este partido, que no forma parte del Gobierno de Artur Mas, no quería dar a CiU y ERC ninguna baza, justo la semana que se conocerá el presupuesto catalán con nuevos recortes. Así se lo trasladó Coscubiela a Duran en la reunión del martes.
Mientras, a la espera de comprobar qué iniciativa de las tres se debate y cuándo, los grupos catalanes han incluido en todos sus discursos alusiones a que se autorice el referéndum. Y Rajoy sólo calla.
EL MUNDO 23/01/14