ABC – 20/08/14
· Oriol Pujol dijo que no era «casual» el proceso judicial sobre las ITV en el que está inculpado.
· Convergencia asume la tesis sobre la conjura antisoberanista que el expresidente expone en su querella.
«Hostilidad política y anticatalanismo». Así definía Jordi Pujol la investigación de Banca Catalana. Y en términos similares se expresa el expresidente en su querella contra los dos bancos andorranos, formalizada ayer, a los que acusa de filtrar información confidencial. De esta forma, el veterano nacionalista resucita el lema «España contra Cataluña» aplicado a las investigaciones abiertas sobre los supuestos casos de corrupción cometidos en esta comunidad en los últimos años.
Tras el desconcierto inicial y la incredulidad que la confesión del propio expresidente provocó entre las formaciones que apoyan el proceso catalán hacia la independencia, el nacionalismo ha abrazado la teoría de la conspiración, apoyado por medios de comunicación afines que, cuando no silencian la noticia, la centran en los argumentos de Pujol y en su estrategia de contraataque. La que precisamente se constata en la querella presentada contra Andbank y Banca Privada Andorra, donde la familia Pujol-Ferrusola tenía depositado el dinero no declarado a Hacienda. Con esta acción judicial, la defensa del exmandatario catalán pretende bloquear o cuando menos, dilatar la investigación.
Los elogios a la figura de Pujol lanzados por los dirigentes nacionalistas han puesto sordina al fraude fiscal admitido por él mismo. El propio presidente Artur Mas, quien le definió como su «padre político», enmarcó el proceso judicial en una serie de «pruebas y desafíos» que irán apareciendo en los próximos meses, por lo que aconsejó a los catalanes «fortaleza psicológica». No aclaró de dónde procederían esos «desafíos», pero la velada alusión a las instituciones del resto de España era evidente. El coordinador general de CDC, Josep Rull, habló recientemente de Pujol como «el dirigente político que llenó de contenido la Cataluña autónoma, sin la cual sería muy difícil plantearse la Cataluña independiente».
«Cloacas del Estado»
En términos parecidos se expresó Santi Vila, consejero de Política Territorial de la Generalitat, quien relacionó las acusaciones contra la familia Pujol con el proceso soberanista. «Hay muchos sectores y muchos espacios políticos que seguramente estarán muy contentos si se pueden acreditar alguna de estas acusaciones, porque es evidente que desde el punto de vista del proceso que vivimos, el presidente Pujol es uno de los padres intelectuales del catalanismo político que hoy ha llegado a las tesis independentistas», dijo.
Mucho más explícito a la hora de culpar al Estado español del «caso Pujol» fue el portavoz de ERC en el Congreso, Alfred Bosch, quien afirma que es en el actual Estado de las autonomías donde «se ha generado este sistema tan corrompido», lo que en su opinión, justifica que Cataluña deba independizarse de España. En esta estrategia Convergencia cuenta con la convivencia de TV3 y otros medios para presentar a Pujol como víctima de una campaña de acoso y derribo ideada desde el resto de España. Diarios digitales afines a la causa secesionista citan presuntos informes de los servicios de espionaje españoles sobre la familia Pujol o aseguran textualmente que «España compró la información de las cuentas de Pujol en Andorra», mientras que determinados articulistas de cabecera hablan de investigaciones llevadas a cabo por «las cloacas del Estado» o restan importancia a que Pujol «robara a un Estado que roba a Cataluña», en alusión a la asfixia financiera que esta comunidad sufre, según aseguran, por culpa el Gobierno español. Hay quien habla de ensañamiento. Denuncian otros portales soberanistas, que «la maquinaria del Estado español ha comenzado una campaña de desprestigio contra el proceso independentista catalán, intentando presentar y vincular a Jordi Pujol, prácticamente como el líder del movimiento».
La televisión y la radio catalanas se han hecho amplio eco de la querella de Pujol contra los bancos andorranos. De hecho, fueron los primeros en dar la noticia y abrieron sus informativos con esta noticia.
Pero los intentos de desviar la atención de un caso de evasión fiscal, reconocido por su autor, se han hecho extensivos a toda la familia Pujol. En tertulias radiofónicas se afirma que la investigación sobre las adjudicaciones irregulares de las estaciones de ITV salió a la luz pública a raíz del nombramiento de Oriol Pujol como secretario general de Convergència en 2012.
El hijo del expresidente, el único con vocación política, está inculpado en este proceso y tuvo que renunciar a los cargos en el partido. Él mismo aludió, de nuevo, a la teoría de la conspiración, pues aseguró a los periodistas tras una comparecencia ante el juez, que «no son casuales algunas cosas que pasan en este proceso».
ABC – 20/08/14