ABC – 24/03/15
· Sánchez le da «todo» su respaldo pero avisa contra cualquier acuerdo con el PP.
Susana Díaz lo tiene claro: los 47 diputados logrados por el PSOE-A en las elecciones le permiten gobernar «en solitario», por lo menos hasta los comicios generales de noviembre. Tiempo habrá de analizar entonces, cuando la tensión de las sucesivas citas con las urnas haya acabado y el nuevo Ejecutivo lleve seis meses de rodaje, si conviene reforzarlo con algún tipo de alianza o no. Y, además, será ella quien lo decida porque ayer despejó una duda que ha generado ríos de tinta: se quedará en Andalucía «toda la legislatura», es decir, que no disputará el liderazgo del PSOE ni aún cuando Sánchez sufriera un batacazo en las elecciones municipales y autonómicas del 24 de mayo.
En el análisis que hace la Ejecutiva andaluza, aunque el PSOE-A ha obtenido igual número de escaños que en 2012, el panorama es bien distinto. José Antonio Griñán necesitó pactar con IU desde el inicio de la legislatura porque había ganado el PP (50 diputados).
Hoy, el claro ganador es el PSOE, seguido a distancia por el PP (33 escaños), mientras que el tercero, Podemos (15), queda muy lejos de los socialistas. Solo una alianza antinatura de ambos partidos puede formar mayorías de «bloqueo» de 48 escaños, pero tanto la Dirección del PSOE-A como Ferraz lo ven improbable.
Díaz exhortó a todos a elevarse por encima de los «líos de partido» y a que «arrimen el hombro y sitúen los intereses de Andalucía por encima de los partidistas». Aún así, le queda por pasar un trámite delicado, su investidura, que puede generar roces con la Dirección Federal si se decanta por aceptar la abstención del PP que le insinuaron en campaña tanto Juan Manuel Moreno Bonilla como Mariano Rajoy.
Ayer, el vicesecretario general del PP, Carlos Floriano, se apresuró a señalar que, de momento, en la primera convocatoria votarán no, pero no ocultó que los populares quieren que gobierne «la lista más votada». Su intención es clara: pretenden que el PSOE actúe recíprocamente tras el 24 de mayo en aquellos sitios donde el PP vuelva a ser el más votado.
El problema es que Ferraz no quiere oír hablar de eso porque ataría de pies y manos la política de oposición de Pedro Sánchez y además le crearía un problema con barones como el extremeño Guillermo Fernández Vara; el castellano -manchego, Emiliano García-Page (ayer no fue a la reunión de la Ejecutiva Federal) o el valenciano, Ximo Puig, cuyas únicas posibilidades de desalojar al PP pasan por pactar con Podemos, IU o Ciudadanos.
El líder socialista fue ayer especialmente cuidadoso en no entrar en estas disquisiciones con una Díaz que ha avisado que no quiere «interferencias». Se limitó a garantizar a la presidenta andaluza «todo el apoyo» de la Ejecutiva Federal en la ronda de contactos parlamentarios y en su decisión de gobernar en solitario.
Con Ciudadanos, «veremos»
Pero, como no es lo mismo que se abstenga el PP que Ciudadanos, Sánchez dejó clara su opinión: «Nada tenemos que ver con el PP», dijo en la rueda de prensa. Cuando se le repreguntó por Ciudadanos, su contestación fue otra: «A ver en qué se concretan sus propuestas y, a partir de ahí podemos opinar». Susana Díaz está convocada este sábado a la reunión del Comité Federal en el que se va a ver las caras con los barones y, a buen seguro, habrá debate. Sánchez agradeció de todo corazón a los andaluces el apoyo que han depositado «en el PSOE y en nuestra candidata» y no quiso contestar al anuncio oficioso de «retirada» de Díaz de la carrera con él por el cartel a La Moncloa en julio.
Quienes sí la loaron fueron dos claros apoyos de la presidenta andaluza: Carme Chacón y el líderdel PSPV, Ximo Puig. Chacón comentó que con su victoria «tan clara y tan clamorosa» la presidenta de la Junta de Andalucía ha dado lecciones de «liderazgo» y de «modelo». Puig, señaló que ella «no es nadie sin el PSOE», pero ha demostrado su valentía adelantando las elecciones y un liderazgo «absolutamente impresionante».
ABC – 24/03/15