…una ciudad como Caracas «que se ha ganado el infame título de ser la más violenta y peligrosa de América Latina, donde conviven policías y militares con forajidos internacionales, terroristas de las FARC y de la ETA, con mafias de narcos responsables por 60% del tráfico de drogas que llega a Europa…
El proceso impulsado contra las 33 personas acusadas de «obstaculizar» el funcionamiento del Metro de Caracas, durante una protesta por el pésimo servicio que presta ese medio de transporte, así como el ascenso de varios oficiales militares acusados de diversos delitos, fueron las acciones cuestionadas por el exembajador Diego Arria, quien acusó al presidente Hugo Chávez de desmantelar la institucionalidad democrática de Venezuela.
En una misiva enviada al mandatario, Arria solicitó explicar el porqué una orden de arresto contra un grupo de ciudadanos desarmados por protestar en una ciudad como Caracas «que se ha ganado el infame título de ser la más violenta y peligrosa de América Latina, donde conviven policías y militares con forajidos internacionales, terroristas de las FARC y de la ETA, con mafias de narcos responsables por 60% del tráfico de drogas que llega a Europa».
Las acciones llevan al exdiplomático a asegurar vehemente que el presidente Hugo Chávez se ha convertido en el peor enemigo de los venezolanos, particularmente de los más pobres y los más jóvenes. Por ello, en el documento solicitó a los ciudadano a «evitar semejante despropósito» a través de la Constitución.
En cuanto a las promociones militares, Arria increpó al Presidente a responder sobre la posibilidad de ascender al general Hugo Carvajal, sobre quien indicó que se trata de un oficial «con méritos similares o superiores a los de Rangel Silva» y que puede ser comparado con Vladimiro Montesinos, principal hombre del gobierno del presidente peruano Alberto Fujimori, cuyos infames «vladi-videos» llevaron al colapso a esa administración. «Desde Colombia nos anuncian videos y grabaciones aún más comprometedoras», apunta Arria.
Asimismo el antiguo dueño de la finca La Carolina, solicitó al mandatario explicar la libertad plena en la cual se encuentra el general Carlos Aniasi Turchio, ligado al presunto narcotraficante Walid Makled cuando estuvo a cargo de cinco patios de almacenaje del puerto de Puerto Cabello.
Aun cuando el exembajador duda de obtener una respuesta por parte del mandatario, le advirtió que tanto él como «sus colaboradores en la misión de destrucción nacional» deberán rendir cuentas a las autoridades judiciales nacionales e internacionales. «La historia reciente indica que ningún jefe de estado está hoy fuera del alcance de la justicia aunque se encuentre en ejercicio de su mandato».
Elimpulso.com (Venezuela), 19/11/2010