Alberto García Reyes leyó el libro de Cayetana y escribió en la última de ABC una columna que parece inspirada por Teodoro García Egea, porque escribe: «he detectado en él (en el libro) cierta inmadurez intelectual, esa soberbiajuvenil que considera a los padres culpables de todos los males, principalmente de las frustraciones». Pasaré de los calificativos que dedica a la autora (Cayetana como sinónimo de pija, con un montón de complejos escondidos tras su laca perifrástica, arrogante, vanidosa, engreída) para centrarme en las cuestiones de la paternidad. Nada más lejos de este libro que el reproche a los padres las frustraciones de los hijos. El primer capítulo del libro es una emocionante y amorosa descripción de su padre, Juan Illán Álvarez de Toledo Giraud, a quien dedica el libro: “A mi padre, que me emplazó. A mis hijas, a las que emplazo”. Al terminar la lectura de este primer capítulo que la autora titula ‘Identidad’ uno desearía haber conocido a este señor tan interesante. Tampoco se ceba en las responsabilidades de los padres de terceros. El mayor varapalo que ha recibido en el Congreso Pablo Iglesias (usted es el hijo de un terrorista) iba precedido de una negación explícita de lo que le reprocha García Reyes: “Como usted sabe, los hijos no somos responsables de nuestros padres, ni siquiera los padres somos del todo responsables de lo que vayan a ser nuestros hijos”. El mayor problema del columnismo español no es que haya tantos colegas que no saben escribir. Es que no sepan leer.
Patxi López se hizo carne de tipografía el domingo con una entrevista en el Correo en la que se ganó un vistoso entrecomillado: “Hemos pactado con Bildu porque la oposición del PP es indecente”. Esta declaración de principios (o de finales) me llevó a dedicarle mi columna de ayer en El Mundo. Por razones evidentes y de espacio, no la voy a repetir aquí, pero sí voy a citar los dos primeros mentís a su titular: Este tipo ha alcanzado en dos ocasiones su nivel de incompetencia y las dos fue gracias al Partido Popular: Llegó a lehendakari después de las elecciones del 1 de marzo de 2009. Ibarretxe había conseguido 30 escaños; él, con 25, entró en Ajuria Enea gracias a los 13 escaños del PP que se los regaló con la sola contraprestación de nombrar presidenta del Parlamento vasco a una hermosa cariátide de los populares vascos llamada Arantza Quiroga.La segunda vez fue cuando su apoyo convirtió a Patxi en presidente del Copngreso de los Diputados entre el 13 de enero de 2016 y el 18 de julio del mismo año: seis meses y cinco días. Vistas así las cosas, el apoyo del PP sí podría calificarse de ‘indecente’, aunque no de oposición. Rubén Múgica me apuntó que Patxi López y Odón Elorza padecen la misma enfermedad: Los dos odian al PP porque es su pecado original. Ninguno de los dos habría llegado a nada de lo que fue si no les hubiese apoyado el PP. Onán no habría sido alcalde de San Sebastián en 1991 y López no habría llegado a lehendakari en 2009 ni a presidente del Congreso en 2016.
Pedro Otamendi: Patxi López no iba a pactar con Bildu porque les separaba un abismo de principios morales, éticos y democráticos. Ahora que el PSOE de Pedro Sánchez necesita sus votos, sí que se pacta con Bildu pero la culpa es del PP. Socialismo
El Capitán dijo: ETA asesinó a Germán González López, Enrique Casas, Vicente Gajate, Fernando Múgica, Francisco Tomás y Valiente, Fernando Buesa, Juan María Jáuregui, Ernest Lluch, Froilán Elespe, Juan Priede, Joseba Pagazaurtundua e Isaias Carrasco porque la oposición del PP es indecente.
Hoy, 15 de diciembre se cumplen 45 años del referéndum para la Reforma Política, que fue el acontecimiento de donde arrancó todo para superar la dictadura “de la ley a la la ley” como acertó a decir el artífice de la Transición, Torcuato Fernández Miranda.
Yo me abstuve, como pedía mi partido. E hice el ridículo, claro. El PSOE, el PCE y toda la izquierda reclamaban la abstención, que sumada a la abstención técnica alcanzó el 22, 28%. El 97,36% de los españoles votaron ‘Sí’. Seis meses después celebramos las primeras elecciones de nuestra vida, en las que participaron todos. La abstención fue un punto más alta, 21,17%.
Iñaki Arteta Orbea, nuestro cineasta de guardia reproducía una foto de Iñigo Urkullu con su homólogo catalán , Pere Aragonés. Ambos están sentados y en actitud comunicativa entre ambos. Arteta hace notar un detalle: “Se les ve sin auriculares para la traducción. ¿En qué idioma han hablado?”
Xavier Pericay reparó en la misma foto, comentando: “Los dos presidentes autonómicos comunicándose en la lengua común, que no es ninguna de las propias de las comunidades que presiden y sí la oficial del Estado al que desprecian”. Qué gran momento para que el doctor Fraude recuerde la coherencia íntima de los socialistas, cuando los andaluces Chaves, de Ceuta, y Montilla, de Iznájar, se comunicaron entre ellos con pinganillo y traductor.
Magda mateos se asombraba ante la carrera de Isabel Celáa: “Quita la religión de la educación, ataca a la concertada y ahora se va de embajadora al Vaticano. El sanchismo es una tomadura de pelo diaria”. Bueno, hay que decir que esto no sería posible sin la connivencia del peronista Bergoglio”. Esto no es ninguna novedad. Ya Felipe González nombró embajador en 1985 el Vaticano a Gonzalo Puente Ojea, que se declaró marxista, ateo y se casó por lo civil, tres cuestiones perfectamente lícitas pero que no adornan un currículum idóneo para la embajada ante el Vaticano. Si hay una actividad política que requiere pragmatismo es la diplomacia. Es triste, pero es así la vida. No estuvo mucho tiempo, pero hay que señalar que el Papa en aquella época era Juan Pablo II, otro nivel.
Albertito Garzón ha tenido que terciar en la polémica del catalán para decir tonterías, como en él es costumbre. Primero regó fuera del tiesto al sostener que él no cree que el castellano esté en peligro. Y luego ha añadido: “El español goza de enormes privilegios”. José Fdez. Torres, un habitual, le recordaba: “El español no tiene privilegios, Alberto. Tiene gramática” y a modo de ilustración recordaba aquella memorable intervención en la que dijo: “hemos proponido cambiar leyes”.
Y volvamos al principio, pongamos que hablo de Patxi López. Gulliver ha dejado en mi blog unos elegantes versos de arte menor dedicados a los
Presidentes del Congreso
Argüelles, Sagasta, Mon,
Riego, Besteiro, Rivero,
Romanones, Espartero,
Castelar y Salmerón…
Honra de nuestra Nación,
¡qué plantel, vaya nivel!…
Mas nuestra Historia es crüel
y hoy con cinismo sanchista
han entrado en esa lista
Patxi Nadie y Meritxel