Algunas veces la política da una pequeña satisfacción al revelar que un cargo público acredita una gestión razonable de los asuntos públicos y eso es detalle que le parece muy plausible a la ciudadanía en una consulta electoral o en esos sucedáneos que convenimos en llamar sondeos de opinión. No estamos hablando de la presidenta de la Comunidad de Madrid, de la que hablan, más que su oposición los apabullantes resultados electorales del 4 de mayo. Digamos que se trata de Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía que va con viento de cola en las encuestas, aunque tiene también su ventarrón de proa, que viene a ser el mismo que el que padece Isabel Díaz Ayuso. Los dos son del PP y con eso está casi todo dicho.
Todo parece indicar que Moreno Bonilla es partidario de una estrategia prudente de avance hacia posiciones próximas a la mayoría absoluta, mientras Casado, vale decir Teodoro, quieren cobrarse la pieza cuanto antes, en la creencia de que una victoria andaluza aumentará la soledad de Sánchez y acercará al presidente del PP al inquilinato de la Moncloa. Podría pensarse que Teodoro García Egea tiene en el punto de mira a las comunidades del PP que marchan bien, salvo Galicia, porque la batalla contra Núñez Feijóo sería una presa demasiado grande para el secretario general.
Teodoro va a acabar siendo un problema para Pablo Casado, pero es que además, acaba de fichar un refuerzo. Se llama Fran Hervías y fue secretario de Organización de Ciudadanos. Si quieren saber más sobre él lean ‘¡Vamos? Una temporada en política’, memorias de Xavier Pericay sobre su paso por Ciudadanos, en el que ofrece un retrato de Hervías que bordea la impiedad y a quien bautiza como ‘hervívoro’, porque se jactaba de no comer carne de libro. A un número dos como García Egea, que no parece un intelectual con fundamento bibliográfico, solo le faltaba una mano derecha como Hervías.
Hace unos meses, antes del verano, el vicepresidente de la Junta por C’s, Juan Marín, comentó entre gente de su grupo parlamentario que no le interesaba presentar unos presupuestos en un año electoral: “sería estúpido”. La conversación tuvo lugar el pasado mes de julio, pero parece que sus palabras fueron grabadas por alguien y ahora, en noviembre fueron oportunamente filtradas a la cadena SER. Juan Marín acusa a Génova de la filtración, más aún, señala a quien fue su compañero de partido Hervías, que ahora tiene asiento en la sede del PP.
Todo esto ya configuraría un panorama complejo, pero aún hay más: Vox, que comparte interés con Génova por el adelanto electoral está por las elecciones cuanto antes. Marín, que tras las autonómicas del 2 de diciembre de 2018, se ofreció enseguida para presidir la Junta, no va a tener ocasión ahora. Los 21 escaños que obtuvo entonces se van a desplomar hasta quedarse entre 2 y 3 y a pesar de los 20 escaños que ganaría el PP no podría alcanzar la mayoría absoluta con C’s de ninguna manera. Necesitaría el apoyo de los 15-17 que las encuestas le auguran a Vox. Ciudadanos no tiene alternativa, quizá por eso ayer, en su intervención en el congreso de Granada, Marín proclamó la casa común del centro-derecha. Es otro dato que Teodoro debería ofrecerle a Casado. Y que le pida ayuda a Hervías si él no llega a apurar las conclusiones.