El adelanto electoral dejará al TC dos semanas para decidir sobre Sortu

DIARIO VASCO, 18/8/11

La izquierda abertzale no descarta llegar a las generales y el Gobierno Vasco lo ve difícil. El Alto Tribunal no está obligado a sentenciar antes del 20-N, pero tendrá margen hasta el 7 de octubre

La izquierda abertzale, EA y Alternatiba han comenzado ya el trabajo para los comicios del 20 de noviembre con la incógnita de si Sortu, el partido del sector ilegalizado, llegará a tiempo a las elecciones generales. El adelanto electoral ha trastocado el calendario, pero deja al Tribunal Constitucional (TC) un plazo de más de dos semanas para pronunciarse, antes de las elecciones, sobre el recurso que defiende la legalidad del nuevo partido independentista, según fuentes jurídicas solventes conocedoras del proceso judicial. Legalmente, el alto tribunal no está obligado a emitir una sentencia antes de ninguna fecha concreta, pero tiene de margen desde el 20 de septiembre, fin del plazo para presentar alegaciones al recurso, hasta el 7 de octubre, cuando acabará el límite para que las coaliciones elec torales se inscriban.

Un plazo lo suficientemente amplio, a juicio de la izquierda abertzale, para que el Tribunal Constitucional se pronuncie. Fuentes del alto tribunal admiten que los magistrados tienen margen de sobra para tomar una decisión antes de que comience la campaña electoral, sobre todo si, como ha ocurrido en otras ocasiones, se le otorga al caso prioridad debido a la cercanía de los comicios. La tesis para ello sería salvaguardar un «derecho fundamental» como es el de participación política, según las distintas fuentes consultadas por este periódico.

El sector ilegalizado no descarta la posibilidad de que Sortu pueda finalmente inscribirse dentro de la coalición de fuerzas abertzales en la que los miembros de Bildu trabajan junto a Aralar. Sus argumentos se sostienen en la sentencia del mismo tribunal favorable a Bildu, en el «potente» voto particular conjunto de los siete magistrados del Tribunal Supremo que se opusieron a la ilegalización, que recogía que Sortu había «roto con ETA», y en la «fortaleza de los contraindicios» del nuevo partido, que en sus estatutos recoge con claridad el rechazo al terrorismo y que en posteriores comunicados rechazó acciones como el tiroteo de ETA en abril en Francia.

Por el contrario, otras instancias, como el Gobierno Vasco, barajan un escenario para el 20 de noviembre sin Sortu, pero sí con la coalición Bildu, integrada por independientes de sensibilidad abertzale de izquierdas, EA y Alternatiba, según fuentes del Ejecutivo. De esta forma, el TC dilataría su resolución sobre un asunto con evidentes connotaciones políticas a la espera de que se celebrasen los comicios generales. El alto tribunal ganaría tiempo ya que la siguiente cita con las urnas no sería, en principio, hasta 2013, fechas de las elecciones autonómicas vascas.

Ante esta eventualidad, la izquierda abertzale, EA y Alternatiba no esperarán a la resolución judicial sobre Sortu para confeccionar sus candidaturas para el 20-N. De momento, están enfrascados en la negociación para fraguar una alianza con Aralar, dado que el PNV, con quien también tiene pendiente reunirse, ya ha rechazado el ofrecimiento.

Coalición en marcha

Los integrantes de Bildu empezarán a elegir candidatos en septiembre, una vez se despeje la incógnita de si Aralar se adhiere a su entente. Si finalmente, aunque sea in extremis, Sortu se suma a la coalición, agregarán a personas de este nuevo partido. Una situación que, lejos de ser un contratiempo, será una noticia positiva para la alianza soberanista pese a los cambios que haya que efectuar, señalan fuentes de Bildu.

De momento, en pleno agosto, la causa está parada. El plazo de alegaciones acababa el 7 de septiembre, pero a instancia de una de las partes el TC decidió a finales de julio prorrogarlo en diez días hábiles, hasta el 20 de septiembre. A partir de esa fecha, los magistrados de la Sala Segunda ya podrían emitir un veredicto. La fecha límite sería el 7 de octubre. Ese día finalizará el plazo de inscripción de coaliciones electorales, que se abre el 27 de septiembre, fecha en la que el Gobierno publicará en el BOE la convocatoria de los comicios. Debe hacerlo 54 días antes de su celebración, el 20 de noviembre, según marca la ley electoral.

Una de las principales incógnitas que sobrevuelan sobre el futuro de Sortu es el final de la polémica originada con la decisión de tres magistrados (dos progresistas y un conservador) de dimitir para forzar la renovación del tribunal. Las dimisiones fueron finalmente rechazadas por el presidente de la institución por lo que, a día de hoy, y a la espera de que se resuelva este contencioso, la sala sigue con una composición de mayoría progresista.

En principio, el futuro de Sortu está en manos de la misma Sala -la Segunda- que vio el recurso sobre Bildu. El empate registrado entonces forzó la intervención del Pleno, que resolvió a favor de Bildu por seis votos a cinco. Si se consumara la dimisión de Eugeni Gay y de Elisa Pérez Vera -ambos encuadrados en el llamado sector progresista-, los conservadores serían mayoría en la Sala Segunda. No así en el Pleno, que seguiría inclinado hacia las sensibilidades más identificadas con la izquierda.

El recurso de Sortu contra la decisión del Supremo que le impidió en marzo inscribirse en el Registro de Partidos, se fundamenta en los argumentos de la sentencia que poco más de un mes después permitió a Bildu concurrir a las municipales y forales. Todo ello, en un escenario sin atentados de ETA que sigue adelante. La izquierda abertzale entiende que la coyuntura sin violencia está lo suficientemente consolidada para que no haya marcha atrás, y considera que la legalización de Sortu supondría un nuevo paso adelante hacia la paz.

DIARIO VASCO, 18/8/11