El alcalde de Leitza (Bildu) declarará mañana en la Audiencia Nacional por enaltecer a ETA

LA RAZÓN, 8/9/11

El alcalde de la localidad navarra de Leitza, Oier Eizmendi Astibia, de la coalición Bildu, declarará mañana, jueves, ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz como imputado por un delito de enaltecimiento del terrorismo tras los actos de apoyo a ETA que presuntamente se cometieron el pasado 10 de agosto, durante el chupinazo que dio inicio a las fiestas patronales de San Tiburcio, informaron fuentes jurídicas.

La imputación, que es la primera que un juez instructor realiza a un cargo electo de Bildu por enaltecer a miembros de la organización terrorista, también afecta a María Lourdes Juantorena Baleztena y Saioa Iraola Urkiola, que aparecieron en el balcón del Ayuntamiento con camisetas de apoyo a la etarra Jone Lozano.

Los tres están citados en el Juzgado Central de Instrucción número 5 para comparecer a partir de las 11.00 horas. Según el informe de la Policía Foral que obra en la causa, la primera portaba carteles que reclamaban el acercamiento de los presos y la segunda pronunció un discurso realizando esta reivindicación.

El pasado viernes el juez Ruz admitió a trámite la denuncia presentada por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, en un auto en el que destacaba que «los hechos relatados presentan características que hacen presumir la posible existencia de un delito de enalticimiento del terrorismo».

Además, libró un oficio a la Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía y al Servicio de Información de la Guardia Civil para que emitan sendos informes sobre estos hechos que complementen el realizado por la Policía Foral de Navarra.

El fiscal jefe pidió la imputación del regidor de Leitza por «la elaboración y distribución del programa de fiestas», en el que se anunciaba la celebración de un brindis a favor de los presos etarras.

ENCAPUCHADOS NO IDENTIFICADOS
Los agentes, sin embargo, no han podido identificar a los cinco encapuchados que salieron al balcón del Ayuntamiento unos minutos antes del chupinazo para exhibir dos pancartas en las que aparecían las fotografías de seis presos etarras y se reclamaba su traslado a cárceles próximas al País Vasco.

Otras dos personas que ocultaban su rostro colgaron también una pancarta con un mapa de Euskal Herria. Además, se celebró una manifestación con el lema ‘Euskal preso eta iheslariak etxera’ (Presos vascos y huídos a casa). Ante todos estos hechos, la Fiscalía solicita que se tome declaración a «cuantas personas se identifique como partícipes en tales hechos».

«INTERESES PARTIDISTAS» CONTRA BILDU
El alcalde de Leitza aseguró este miércoles que el brindis por los presos «se hace todos los años» en el municipio, por lo que, a su juicio, su imputación responde a «intereses partidistas» y se enmarca, según la coalición, dentro «de la caza que se está realizando contra Bildu».

También explicó que no se enteró «de nada de lo que pasó» y no vio
a los encapuchados que aparecieron en la plaza con pancartas de apoyo
a los presos de ETA, hasta el punto de que se enteró de su actuación «al día siguiente en la prensa».

Además, incidió en que «ningún» miembro de la Corporación municipal participó en el brindis a favor de los presos, una actividad que «se hace todos los años» y con la que «nunca ha habido ningún problema». Según dijo, este acto aparece «todos los años en el programa de fiestas», tal y como se hace en «muchos otros pueblos» de la comunidad foral.

LA RAZÓN, 8/9/11