Del Blog de Santiago González
Hay un punto siniestro en la ministra más risueña del Gobierno de coalición progresista, la titular de Trabajo, Yolanda Díaz. Estamos entre la severa gobernanta de la Transición Ecológica y vicepresidenta cuarta, Teresa Ribera y esta señora que en su manera de ponerse los guantes anuncia una promesa de tacto rectal.
Yolanda y su equipo están muy contentos por haber conseguido un récord, que además, tiene carácter de ‘histórico’. Cualquier otro ministro o ministra de Trabajo, se mostraría satisfecho (o satisfecha) ante datos que revelasen una drástica reducción de la tasa de paro, por la creación de puestos de trabajo o por el aumento del número de cotizantes a la Seguridad Social. Nuestros izquierdistas no. Ellos aspiran a que aumente el número de parados que viven de la sopa boba. Ayer, en el 202 aniversario del nacimiento de Marx, Yoli y los suyos estaban muy contentos porque su ejército de reserva crece; los parados, esenciales para la acumulación del capital en opinión de Marx, son aún más importantes como base sobre la que levantar el socialismo. Lo nunca visto:
La prensa amiga hacía el acompañamiento. La página web de El País, el martes, a eso de la una de la tarde daba cuenta de la alegría colectiva. Hacía tres horas que nos habíamos enterado de un récord en las cifras del paro registrado, aunque el periodismo progresizta siempre encuentra la manera de ofrecer la noticia por el asa que no quema, y aun así, bien escondida. Fíjense qué titular: “Las ayudas a 4.5 millones de afectados por ERTE y autónomos evitan un colapso mayor en el empleo:
Mientras, la portada web de El Mundo en Orbyt titulaba: “El paro se dispara un 8% hasta los 3,8 millones, el mayor repunte para el mes de abril”
Es lo que hay, así está el tema.