EL MUNDO 06/10/13
El Gobierno catalán aboga por convertir las elecciones europeas en plebiscitarias
«Siempre estaremos al lado de nuestro país y de la voluntad de su pueblo. Defendemos el derecho a decidir porque forma parte de los derechos fundamentales que deben tener las personas y todos los pueblos. Sólo faltaría en democracia». El presidente del Barcelona, Sandro Rosell, realizó esta proclama durante la asamblea ordinaria de socios compromisarios de la entidad celebrada durante la tarde de ayer. En mitad de su informe anual, en la parcela institucional, el mandatario hizo alusión sin mencionar el proceso independentista. Y en esa línea, argumentó: «Somos más que un club. Somos un club catalán y catalanista. Por historia, por identidad y por convicción».
No es la primera ocasión en la que se escucha al mandatario entrar en aspectos políticos. Durante la última asamblea, hace poco más de un año, cerró su discurso ante los socios compromisarios con un mensaje en el que ya señalaba que el club defendería «la voluntad de la mayoría, respetando a la minoría».
La exposición de Rosell va en esa dirección desde hace tiempo. «Hemos reforzado los lazos con las instituciones de Cataluña y hemos colaborado en la difusión de los valores del club y del país», manifestó.En esa senda, habló de la segunda equipación barcelonista, inspirada en la senyera y que fue presentada en el Palau de la Generalitat ante el president Artur Mas. Una elástica con la que Rosell recordó que el Barça se adjuntaba a los festejos por el tricentenario de 1714 a celebrar el próximo año. La idea inicial que maneja la entidad azulgrana es que esta equipación de la senyera sea la tercera mientras Rosell continúe en el cargo.
Cataluña sigue su camino inexorable hacia el choque de trenes con el Gobierno. Ayer mismo, el portavoz del Govern, Francesc Homs, abogó por convertir las próximas elecciones europeas en una suerte de plebiscito, un «ensayo general» para la próxima consulta, según TV3. Desde las filas de ERC, el diputado Alfred Bosch se abrió por su parte a esta iniciativa, siempre y cuando se fije de una vez la pregunta y la fecha para la consulta independentista.
Convergència Democràtica tiene la vista puesta en los comicios europeos y baraja presentarse en coalición con los republicanos, una opción que no convence a Unió.
Los partidos de la oposición no tardaron en replicar a Homs. El portavoz del PP en el Parlament, Enric Millo, dijo que «Europa es el proyecto de la unión donde los separatistas no tienen cabida» y lamentó que al Govern «le preocupe más separar y dividir, en lugar de contribuir en positivo para hacer de Europa un lugar más justo y próspero».
Por su parte, el líder del PSC, Pere Navarro, afirmó que «los extremos se ponen muy nerviosos» ante quienes abren «nuevos caminos y vías de acuerdo», en referencia a su formación y la llamada tercera vía.
Sobre esta cuestión, el ex presidente del Parlament Joan Rigol pidió ayer a los partidos que defienden el derecho a decidir que busquen puntos de entendimiento para sacar adelante la consulta y que se den cuenta de la trascendencia del momento histórico que vive Cataluña.