EL MUNDO – 05/12/15
· Barrena explica ente el tribunal sus contactos con Rubalcaba, con el etarra entre el público.
El histórico dirigente de Batasuna Pernando Barrena ofreció ayer ante el tribunal que le juzga por terrorismo algunos detalles de los contactos entre el PSOE y la izquierda abertzale ilegalizada. Barrena explicó desde el banquillo de la Audiencia Nacional que en abril de 2006, durante la tregua de ETA, el recién nombrado ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, pidió mantener con él «una vía de comunicación directa» para «abordar temas de urgencia o que necesitaban de soluciones inmediatas», según las palabras de Barrena recogidas por Efe y Europa Press. La solicitud le llegó a través de un miembro del gabinete de la Delegación del Gobierno en Navarra.
Barrena precisó que a las reuniones acudían los ex dirigentes del PSE Patxi López y Rodolfo Ares, que actuaban «en tiempo real» como «representantes del Gobierno español». Decían hablar en nombre de Rubalcaba y, «en ocasiones», del propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
El dirigente abertzale también explicó que la comunicación política con los socialistas se mantenía desde 2001, «ante la expectativa de que llegaran al Gobierno en Madrid». Llegaron en 2004 y «personas del PSOE» vinculadas con el Ejecutivo enviaron un mensaje a la izquierda abertzale: «permitir» su actividad política. A continuación ETA declaró la tregua: «Si sumabas dos más dos era lógico pensar que era una contrapartida».
Las buenas migas acabaron en diciembre de 2006, cuando ETA atentó contra la T-4 y condujo al fin de la negociación. «[Rubalcaba] nos dijo que la izquierda abertzale iba a pagar aquello con la detención de más de 200 militantes», sostuvo Barrena. Meses después se produjo el arresto de la cúpula abertzale, incluido Barrena. Desde el jueves, él y otras 34 personas se enfrentan a peticiones de 10 años de cárcel por pertenencia a organización terrorista por su relación con Batasuna, PCTV y ANV.
A preguntas de su abogado, Barrena aseguró que las 110 ruedas de prensa y comparecencias públicas contabilizadas por la Fiscalía lo fueron «a título personal», no como portavoz de Batasuna. También negó su vinculación con ETA, que tenía entre el público un insigne representante: su relato sobre la negociación fue escuchado por Jesús María Zabarte, más conocido como el Carnicero de Mondragón.
Zabarte llegó a la Audiencia con un pañuelo al cuello en el que se leía «Libre». Formaba parte de un grupo de personas de Mondragón que apoyaba a una ex alcaldesa acusada. Condenado a 618 años por 17 asesinatos –entre ellos el del niño José María Piris–, Zabarte fue excarcelado en 2013 tras la anulación por parte de Estrasburgo de la doctrina Parot. En noviembre del año pasado fue imputado por enaltecimiento del terrorismo por manifestar en una entrevista a EL MUNDO que no se arrepentía. «Yo no he asesinado a nadie, yo he ejecutado», dijo.
EL MUNDO – 05/12/15