EL MUNDO 09/03/13
Dialogar con la banda no está entre las preferencias de los vascos, según el Sociómetro
El desarme de ETA constituye para la población vasca la cuestión más importante a la hora de consolidar la paz y la convivencia, según los resultados del primer Sociómetro del año elaborado por el Ejecutivo de Iñigo Urkullu. Los ciudadanos otorgan a la entrega de las armas una relevancia capital de ocho puntos sobre 10, seguido por el reconocimiento de todas las víctimas (7,5 puntos).
La necesidad de iniciar un proceso negociador con la banda terrorista no aparece entre las ocho prioridades que recoge el informe, elaborado a partir de 2.201 entrevistas realizadas entre el 31 enero y el 7 de febrero. Sí se encuentra como tercera opción más importante el inicio de un diálogo liderado por el Gobierno vasco con todas las fuerzas políticas y sociales (7,4), el reconocimiento del derecho a decidir del pueblo vasco (7,1) y la petición de perdón de ETA a las víctimas (6,9).
La población vasca antepone todas estas cuestiones a la situación de los presos, donde el entorno abertzale está centrando sus esfuerzos para presionar al Gobierno central, ya que el acercamiento de los reclusos etarras a las cárceles de Euskadi ocupa el sexto lugar de las prioridades de la ciudadanía (6,2), según se refleja en el Sociómetro vasco. La transferencia de la política penitenciaria al País Vasco (6,1) ocupa el séptimo lugar de una lista que cierra la reinserción de los reclusos (otro 6,1).
El apartado relativo a la consolidación de la paz y la convivencia se completa con una interpelación sobre los agentes que deben intervenir en el proceso de paz. La sociedad vasca estima que las víctimas del terrorismo deben jugar un papel similar al de ETA, ya que un 58% de los encuestados considera que la banda debe tomar parte del proceso, frente al 59% que incluye a las víctimas. A este respecto, el Sociómetro da el principal protagonismo al Gobierno vasco (el 92% de los ciudadanos defiende su intervención) por delante de los partidos políticos de Euskadi (83%) y el Ejecutivo central (78%), que ocupa el tercer lugar. Por otra parte, el Sociómetro vasco ha constatado el primer desgaste del gabinete de Urkullu transcurridos apenas tres meses de gobierno. Ante las expectativas del nuevo Gobierno vasco, el 53% de los encuestados estima que el PNV no ha mejorado la confianza en el Ejecutivo, ya que «se mantiene igual» que con el anterior, liderado por el socialista Patxi López. Sólo uno de cada tres vascos admite que ha aumentado su confianza «algo» o «mucho» en el nuevo inquilino de Ajuria Enea.