El fin de ETA aún suscita recelos

LA VANGUARDIA, 14/11/11

Más del 90% de los españoles exige que la banda entregue las armas antes de adoptar ninguna medida | El 50% rechaza el acercamiento de los presos y el 63%, cualquier beneficio

Barcelona. (Resdacción).- Más de cuatro décadas de terrorismo y casi novecientas víctimas mortales han dejado un profundo poso de desconfianza en la sociedad española frente a cualquier iniciativa de paz anunciada por ETA. El sondeo del Instituto Noxa para La Vanguardia refleja con mucha claridad ese estado de ánimo, ya que las opiniones de los españoles ante el comunicado en el que la banda terrorista anunciaba el final definitivo de la actividad violenta revelan una abierta división entre la esperanza, el recelo y la más absoluta desconfianza sobre las verdaderas intenciones de los etarras.

Concretamente, sólo el 22% de los ciudadanos entrevistados manifiesta plena confianza en que el comunicado de ETA suponga el fin definitivo del terrorismo. Y una proporción más elevada, el 33%, confía también en que ETA cumpla ese compromiso, pero manifiesta algunas dudas al respecto. La opinión más común, sin embargo, se inclina por una desconfianza sistemática de todo comunicado que venga de ETA: el 44% de los españoles afirma que no se cree las declaraciones ni los propósitos de los etarras.

Sólo las opiniones de los catalanes tienden a ser algo menos recelosas, ya que el 30% de ellos confía plenamente en el comunicado de la banda, mientras que el 36% manifiesta algunas dudas, y únicamente el 34% desconfía totalmente de las intenciones de ETA.

Atendiendo al voto de los consultados, se advierte que los votantes de PSOE, IU-ICV y CiU se encuentran muy divididos entre la esperanza y el recelo, mientras que los electores del PP son los más firmes en su actitud de desconfiar de todo lo que anuncie ETA. En concreto, mientras un 30% de los votantes socialistas o de IU, y un 40% de los de CiU, confían en que el final de la violencia es definitivo, sólo un 6% de los electores del PP muestra idéntica convicción. Por el contrario, el 64% de los votantes populares dicen no creer ninguna declaración de ETA, una tasa que desciende a alrededor del 30% entre los electores de CiU, el PSOE o Izquierda Unida.

El proceso que se abre tras el anuncio del fin de la violencia terrorista también propicia una batería de opiniones muy diversas entre los españoles, que difieren en algunas cuestiones aunque coinciden abrumadoramente en otras. Así, la mayor coincidencia se registra en torno a la necesidad de que ETA entregue las armas antes de que el Gobierno se plantee la adopción de medidas de ningún tipo. En este asunto está de acuerdo el 92% de los españoles y el 91% de los catalanes. Y esa unanimidad se extiende a los electores de todos los partidos.

Las opiniones están más divididas, en cambio, en lo que se refiere al posible acercamiento de presos etarras a las cárceles del País Vasco. Hasta el 41% de los ciudadanos se muestra de acuerdo con esta medida, pero el 50% se pronuncia en contra. Hay que señalar que en Catalunya se invierten los porcentajes, pues está a favor el 52% y en contra el 41%. Y en este tema las posiciones de los respectivos votantes son también algo diversas. Así, un 43% de los electores del PSOE está a favor del acercamiento de los presos, porcentaje que se eleva al 55% entre los de CiU y al 63% entre los de IU. En cambio, sólo un 29% de los votantes del PP apoya el acercamiento de los presos etarras.

El mayor rechazo se registra ante la eventual oferta de beneficios penitenciarios para los presos etarras, en las mismas condiciones que cualquier otro recluso. Sólo uno de cada tres españoles está a favor de esta medida (el 31%), mientras que el 63% se muestra radicalmente en contra. Y en Catalunya la correlación no es muy distinta: el 34% está a favor y el 59%, en contra.

En conjunto puede afirmarse que los votantes del PSOE (49%) y del PP (62%) rechazan tanto el traslado de los presos a Euskadi como los beneficios penitenciarios, mientras que los electores de IU están más conformes con el traslado de presos al País Vasco (63%) y a la oferta de beneficios (59%). En cuanto a los electores de CiU, se muestran abiertos al traslado de los reclusos (55%)aunque no a los beneficios (medida que rechazo el 66% de ellos).

Asimismo, no parece que los ciudadanos consideren que el fin de ETA vaya a tener gran influencia en los resultados de las próximas elecciones; sólo un 17% cree que este hecho beneficiará al PSOE; un 6% al PNV, y otro 6% al PP. El 29% piensa que no tendrá ningún efecto y el 25% sostiene que beneficiará a la izquierda abertzale. Y respecto a la incidencia que el final de la banda pueda tener sobre las expectativas independentistas del País Vasco, el 21% de los españoles piensa que éstas habrían aumentando con la declaración, mientras que el 8% cree que han disminuido. Sin embargo, una mayoría del 64% piensa que las posibilidades de la independencia de Euskadi son hoy las mismas que existían antes del comunicado de ETA.

LA VANGUARDIA, 14/11/11