El Gobierno ofrece al PNV más concesiones económicas

 EL PAÍS 06/12/16

· Montoro hará concensiones al País Vasco para atraer al PNV

· El Gobierno se dispone a resolver un problema de deuda a corto plazo del ejecutivo en Euskadi, pacta un objetivo de déficit más flexible y estudiará revisar y liquidar el cupo

Gestos, otro clima político descaradamente de cortejo, ayudas económicas para resolver problemas urgentes de deuda y compromisos genéricos de estudiar asuntos tan relevantes de la agenda vasca como la revisión y la liquidación pendiente del cupo, lo que el ejecutivo vasco aporta a las arcas del Estado. El Gobierno está dispuesto a cambiar su inexistente relación de estos últimos cinco años con el PNV para atraer a ese partido en la negociación de los presupuestos de 2017 y otras alianzas futuras. Mariano Rajoy y Andoni Ortuzar, el presidente del PNV, están cerrando una entrevista formal en La Moncloa.

El recién nombrado consejero vasco de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, y el refrendado ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, formalizaron este lunes durante una reunión de dos horas y media en la sede en Madrid del Ministerio el deshielo entre esas dos administraciones. Rajoy ha dado orden hace semanas de recuperar esos contactos y en fuentes de la ejecutiva del PNV admiten que viven este periodo de “cortejo evidente, palpable y de pura necesidad” por parte del PP con la idea última de sacarle provecho.

Pedro Azpiazu enumeró en Madrid tras verse con Montoro, al que conoce por compartir escaños en el Congreso durante casi 10 años, algunos puntos básicos de la recurrente agenda vasca de reivindicaciones pendientes. La primera demanda siempre es la situación del cupo vasco, la cuota que esa autonomía aporta para determinados gastos del Estado. Ese porcentaje se negocia en una ley quinquenal que no se revisa desde 2007. El ejecutivo vasco sostiene que desde entonces ha aportado entre 1.500 y 1.600 millones de euros más de lo que debería, según una serie de criterios de competencias que se han negociado en este tiempo con otras autonomías. El Gobierno central lo discute.

Azpiazu pidió que se liquide cuanto antes ese dinero y que se inicie la revisión de ese cupo económico vasco para mejorar la situación de Euskadi en ese reparto. Montoro no explicó públicamente su posición. El consejero vasco se limitó a comentar que el tono del encuentro había sido muy cordial y que ambos habían expresado “su voluntad total y firme” de ponerse a concretar aspectos en tres grupos de trabajo.


«Un referente de estabilidad y confianza en Europa y España»
En La Moncloa siguieron con gran interés este fin de semana la repetición de las elecciones en Austria y sobre todo el resultado del referéndum en Italia. Rajoy, de fin de semana en Galicia, publicó un tuit para felicitar al candidato vencedor austriaco y a su pueblo “por apostar por la moderación y por una Europa unida”. Prefirió no pronunciarse sobre la derrota y retirada de Mateo Renzi, con el que nunca conectó demasiado bien. En su entorno sí quisieron subrayar que “Rajoy y su gobierno se han convertido en un referente de estabilidad en Europa y de estabilidad y confianza en España”. Fuentes oficiales aludieron así a la subida registrada en el último barómetro del CIS en los parámetros de confianza sobre todo con respecto a meses anteriores, cuando aún había un Gobierno en funciones. El CIS también constata una leve mejora de la percepción política del país aunque la gran mayoría la sigue calificando de muy mala.

El dirigente vasco apuntilló otra reivindicación casi histórica en este caso sobre el desarrollo y la financiación de la Y vasca ferroviaria, que lleva atascada años por problemas técnicos y económicos. El Gobierno vasco se encarga del trayecto en el territorio de Guipúzcoa y el central a su paso por Álava y Vizcaya. Hay un escollo específico en el nudo de Bergara. Azpiazu propuso este lunes a Montoro que el Gobierno vasco asuma ahora todos los costes de las obras en todos los recorridos y luego se les descuenten esas partidas del cupo que aportan para financiar las arcas del Estado.

No hubo una conclusión común del inicio formal de estas conversaciones. Azpiazu valoró la buena disposición actual del ejecutivo de Rajoy, que Montoro se aviniese a una negociación bilateral y no en la Conferencia Política y Financiera con las demás autonomías y que se les haya permitido una senda del déficit público del 0,7% del PIB como tope para este año, del 0,6% para 2017, el 0,3% para 2018 y el 0 para 2019.

Azpiazu no lo dijo tras la cita, pero en el Ministerio de Hacienda sí destacaron también un problema de endeudamiento a corto plazo de la administración vasca y su interés por ayudar a resolverlo. Montoro no se cierra a hablar, en un siguiente paso de la negociación, de cómo liquidar también el cupo y de su revisión para el futuro. El PNV acepta que esa discusión será más larga que su toma de posición, en las próximas semanas, sobre el presupuesto y que tendrá que ver más con el cese y retirada de los 30 recursos sobre competencias planteados, sobre inversiones ferroviarias y sobre una rebaja de la tarifa eléctrica para las industrias vascas.

Al consejero vasco le costó admitir en público que había conversado con Montoro sobre los presupuestos de 2017. El PNV hace alarde de su separación de funciones y poderes. Esa parte de la negociación la lleva su grupo parlamentario y la dirección del partido y está a la espera de arrancar, probablemente en unas semanas, tras el encuentro de Rajoy y Ortuzar.