El paripere nacional

ANTONIO BURGOS, ABC – 28/06/15

· Los de Podemos, que vinieron de coñonrao, se están hartando de enchufar maridos, sobrinos…, en plan Mienmano.

Perdonen, de entrada, que use el adjetivo «nacional». Me consta está muy mal visto hacerlo. Por lo de: «¿Qué van a decir los separatistas catalanes, por Dios, que se atribuyen ellos solos la exclusiva de lo nacional, y que le den por saco a la nación española?». Tanto cuidado se tiene en no usar la palabra «nacional» (el bando que ganó la guerra, pero que ahora resulta que la perdió), que se ha quitado en todos los organismos que rotulaba. La Lotería Nacional es ahora «Apuestas y Loterías del Estado».

El Servicio Meteorológico Nacional es Agencia Estatal de Meteorología. Y todo así. Por la vía de la paradoja no vamos a parar hasta que en los sellos de Correos ponga «Estado Español», como los que imprimían los nacionales en Burgos durante la guerra. De milagro a Radio Nacional de España le llaman Radio Nacional de España y no de Merimée. Me extraña incluso que en aplicación de la Memoria Histórica no la hayan cerrado, porque la fundó Franco en Salamanca en 1937, en plena guerra, como aparato de propaganda, dicen que por inspiración del valleinclanesco Millán Astray, tras el éxito del micrófono de Queipo de Llano en la actual Radio Sevilla de la SER.

Estimándome perdonado, pues, por el uso de «nacional», paso a hacerles ver que lo malo no han sido los ERE, río del mangazo que esta semana ha desembocado en el ancho mar del Supremo. Lo peor es el Paripere Nacional, que continúa. ¡Cuánta falsía! En los ERE hemos asistido a la confirmación de las palabras de Chaves, cuya cabeza pedía Ciudadanos para perpetuar el paripere del Régimen Andaluz. Chaves dijo aquello memorable: «Los ERE son cosa de cuatro golfos». Y en plan Juan Ramón, de «intelijencia, dame el nombre exacto de las cosas»; o en plan Machado, de «qué bien los nombres ponía/quien puso Sierra Morena/a esa serranía».

En ese plan, el Supremo ha dicho: «¿Qué, señor Chaves, que los ERE eran cosa de cuatro golfos? Pues nosotros le vamos a decir los nombres de esos cuatro golfos: usted, Griñán, Zarrías y Viera». O Viese. El único que sabe Dios como parte de qué maniobra orquestal en la oscuridad no se ha prestado al paripere de los ERE y se ha negado a entregar el acta de diputado… que sus compañeros de golfería mantienen en el bolsillo a la hora que es. Cuando Viera ha hecho cosas terribles. Peores que los ERE. Los curristas no le perdonaremos jamás que como delegado de la Junta le pusiera un injustísimo multazo al Faraón de Camas cuando el 12 de octubre de 1999 se negó a torear sobre un pisoplaza de Sevilla del que acababa de zarpar Noé con el arca: con dos cuartas de agua. Viera, cuya profesión es entrenador de fútbol en el Algeciras y en el Sevilla Atlético, sabía mejor que nadie que en aquel ruedo podía flotar el balón y el toro…hacerse los cien metros mariposa.

Esto es lo más lamentable de los ERE, lo que apuntaba mi apreciado Ignacio Martínez: comprobar en manos de quiénes hemos estado… y seguimos estando. Que un maestro que apenas conoció la tiza y se dedicó a entrenar equipos de Tercera, con el carné del PSOE en la boca llegara a consejero de Empleo en la región con más paro de Europa. Señores de este jaez han enjaezado a la calesera el Régimen andaluz. Que se ha perpetuado gracias al paripere de Ciudadanos, que ha apoyado la investidura de una señora del partido de los ERE, protegida de los nominados por el Supremo.

Eso es lo peor: el Paripere Nacional. Que hasta los de Podemos, que vinieron de coñonrao, se están hartando ya de enchufar maridos, primos, sobrinos y demás parientes y afectos, en plan Mienmano. Y que el PSOE, con sus votos, haya alzado a la gobernación del sistema a los que hasta ayer por la mañana se proclamaban antisistema. Y que los que eran profesionales contra el desahucio no hayan tenido otro norte que desahuciar y desalojar al PP. Y que Ciudadanos haya hecho encaje de bolillos con el voto de los mosqueados con el PP y Podemos con los cabreados del PSOE. Ese paripere si que es, al menos, tan lamentable como los ERE. Vivimos en la época del Paripere Nacional.

ANTONIO BURGOS, ABC – 28/06/15