El Rey acusó a CiU en 2012 de «sacar a la gente a la calle con engaños»

EL MUNDO 19/09/13

«Yo estaba acojonado». Así de explícitamente se despachó el presidente de la Diputación de Barcelona, Salvador Esteve, para narrar el tono de una supuesta discusión con el Rey sobre la deriva independentista en Cataluña.
El enfrentamiento con el Monarca se produjo, según Esteve, el 13 de septiembre de 2012. Es decir, dos días después de la multitudinaria manifestación de la Diada que Artur Mas interpretó como un mandato del pueblo catalán para perseguir la secesión. El primer presidente de CiU en la Diputación barcelonesa aseguró que Don Juan Carlos aprovechó la recepción que ofreció a la junta directiva de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para dirigirse a él y espetarle: «Tú, vaya la que habéis organizado en Cataluña, sacando a la gente a la calle con engaños, con la ayuda de TV3, el Avui y La Vanguardia». En una entrevista en la cadena radiofónica local La Xarxa, Esteve aseguró que el Rey le señaló «de manera contundente» y se dirigió «textualmente» en esos términos ante los 21 alcaldes que en ese momento estaban presentes. El reproche del Monarca supuso, dijo, el inicio de «una experiencia muy desagradable» que, según él, había empezado sin motivo alguno.
Dicho trance derivó, según el relato del presidente de la Diputación de Barcelona, en un notable rifirrafe. Esteve explicó que, lejos de acatar, optó por rebatir la reprimenda real. «Me pareció que no debía callarme y le dije, con todos los respetos, que esto no era ninguna manipulación, sino una corriente muy profunda y que haría bien en escucharla e instar al diálogo». Sostuvo Esteve, en un relato que se produce un año después del hipotético choque con el Monarca, que la reacción de Don Juan Carlos fue, entonces, «mucho más fuerte porque no está acostumbrado a que le repliquen». «Y la cosa se fue calentando», añadió.
Durante su relato, el nacionalista subrayó que hubo un momento en el que creyó que el Rey iba a cogerlo «por la solapa». «Fue muy, muy violento», incidió Esteve.
No satisfecho con la acusación, el presidente de la Diputación también se atrevió a juzgar las consecuencias del «desagradable» episodio. Dijo Esteve que el Rey le «demostró» que no puede ser el «árbitro» del conflicto abierto entre la Generalitat y el Gobierno porque el Monarca «está jugando de delantero centro».
La carta que unos días después hizo pública la Casa Real y en la que el Rey tildaba de «quimeras» las aspiraciones secesionistas de Cataluña apuntalaron, en opinión de Esteve, su idea de que el Rey está desacreditado para mediar en el encontronazo sobre la soberanía.
Salvador Esteve gobierna desde 2011 la Diputación de Barcelona. Tras arrebatar a los socialistas por primera vez en democracia el mando del organismo, CiU alcanzó una alianza con el PP para su gobernanza, que rompería en febrero de 2013. Lo propició el lógico alejamiento entre las dos fuerzas después de que la apuesta soberanista pasara a capitalizar la agenda de la federación nacionalista en todas las Administraciones públicas de Cataluña en las que ostenta el poder.