El soberanismo desmadeja al PSC

El debate sobre el soberanismo ha desmadejado de tal manera al PSC que ayer, quizás el día de la votación más importante de esta legislatura, fue incapaz de retener por más tiempo su sangría. El sector crítico rompió en el Parlament la disciplina de voto contrario a la declaración de soberanía de CiU, ERC e ICV-EUiA y parte de la antigua cúpula, encajada también en el menguante sector catalanista, se encargó de desautorizar el liderazgo de Pere Navarro.

Éste fracasó en su intento, en días previos, de mantener a los cinco diputados díscolos -la ex consellera Marina Geli; el alcalde de Lleida, Àngel Ros; y los diputados Rocío Martínez-Sampere, Joan Ignasi Elena y Núria Ventura- dentro de su estrategia, que pasaba por defender una declaración propia con una consulta pactada con el Estado, previa reforma de la Constitución. Si bien los cinco diputados votaron a favor de la propuesta, posteriormente evitaron ejercer su sufragio contra los planes de CiU y ERC.

Convertidos en centro de atención de todos los medios tras aprobarse el texto, los diputados rebeldes defendieron posteriormente su decisión, argumentando que se trataba de una muestra de «respeto» hacia su partido -Sempere, Elena y Ros forman parte de la dirección- , así como una muestra de que el PSC es «un partido plural» que cuentan entre sus principios con el respeto «al derecho a decidir».

El desafío interno fue recibido por la actual dirección con «un serio disgusto», tal y como señaló el número dos del partido, Maurici Lucena, quien admitió que el debate en torno a la soberanía ha generado las «tensiones» internas que ayer se plasmaron en el Parlament. Lucena, eso sí, evitó especificar si el partido sancionará a los diputados, quienes asumieron «conscientemente» esa posibilidad.

La herida abierta en el hemiciclo se agravó, además, por la irrupción de ex miembros de la cúpula como Montserrat Tura o Joaquim Nadal, quienes aprovecharon para desgastar, aún más, el crédito del líder. La ex consellera, alejada de la primera línea tras ser derrotada sin paliativos en su intento de liderar el partido, señaló en su cuenta personal de Twitter que «nunca un primer secretario del PSC había roto tantos puentes construidos por integrar el pensamiento progresista y catalanista». Mayor simbolismo cobró, sin embargo, el anuncio realizado por el ex presidente del grupo parlamentario, Joaquim Nadal, quien anunció en la misma red social que abandonará el Consell Nacional. El no a la declaración soberanista dictado por Navarro hizo, en palabras del ex portavoz socialista, que «no me vea con fuerzas para seguir».

EL MUNDO 24/01/13