La alcaldesa trató la polémica en el soportal del Ayuntamiento con el portavoz socialista, que se negó a subir a su despacho sin guardaespaldas
La alcaldesa de Andoain, Ane Carrere, mantiene su negativa a que los escoltas de algunos de sus compañeros de Corporación accedan al Ayuntamiento. La representante de Bildu se lo volvió a manifestar ayer a su predecesor en el cargo y ahora concejal por el PSE, Estanis Amutxastegi, en el transcurso de una reunión que mantuvieron en la mañana de ayer en el soportales de la Casa Consistorial después de que el veto de Carrere a que los guardaespaldas accedieran al edificio obligó a que el encuentro se realizara en el exterior.
«La semana pasada me llamó ella y quedamos a las ocho y media de la mañana. Cuando he llegado, la Policía Municipal me ha advertido de que si quería subir tenía que hacerlo sin mi protección, que llevo desde hace once años. Me he negado y he pedido que avisaran a la alcaldesa», explicó Amutxastegi. Carrere accedió a bajar para expresar en el ‘arkupe’ al edil socialista que consideraba que «para la normalización se requiere que no haya guardaespaldas en los ayuntamientos» y que su seguridad estaba «garantizada» y que era «total».
Amutxastegi, según explicó, trató de hacer ver a su sucesora que tenía «unos condicionantes» que no dependían de él. «Le he dicho que yo no soy nadie para diseñar el dispositivo de seguridad. Que de eso se encargan los dos profesionales que me ha puesto el Gobierno vasco y que yo tengo que hacer lo que ellos me dicen», manifestó. El edil del PSE ofreció incluso la opción de que «sólo subiera uno de ellos, que revisara las estancias por donde me movería y que luego abandonaría el recinto», no sin recordar que «la normalización llegará también cuando dejen las armas los del otro lado», en referencia a ETA.
Carrere, molesta con una situación que considera trasciende del ámbito municipal, mantuvo su firmeza, aunque sí decidió «darle una vuelta al tema», explicó Amutxastegi. La conversación, que se prolongó durante aproximadamente un cuarto de hora, se cerró con el compromiso por parte de la alcaldesa de Bildu de realizar una llamada al concejal socialista para comunicarle su postura final. Esa decisión, quiso remarcar, siempre se tomará en el seno de la organización local de Bildu, sin que haya ningún tipo de injerencias de otros órganos de la coalición abertzale.
Carta amenazante
Carrere también comunicó a Amutxastegi que esta polémica había desembocado en la llegada de una carta amenazante hacia su persona. «Le he dicho que no lo sabía, porque no lo sabía, pero me he mostrado mi solidaridad y expresado mi condena a este tipo de actuaciones, porque el PSOE las ha criticado siempre, sea quien sea su destinatario», afirmó el veterano edil.
Amutxastegi espera por tanto la llamada de la alcaldesa de Andoain y anuncia que, en el caso de que se mantenga el veto a sus escoltas, adoptará una «posición de insumiso», tanto de él como de sus compañeros, «aunque puede ser temporal», según quiso aclarar. Carrere está citada hoy con la concejal del PP Asun Guerra, que anoche aún no tenía «clara» la postura que adoptaría en caso de una nueva negativa.
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EL CORREO, 28/6/11