En un país normal…

LUIS VENTOSO, ABC – 24/07/14

… Sánchez olvidaría las zarandajas federalistas y acordaría con Rajoy la defensa de la nación.

El lunes Rajoy recibirá a Pedro Sánchez, nuevo y sonriente jefe del PSOE. Rajoy lo quiere ver para preparar su complicada entrevista con Artur Mas, fanatizado político independentista que ha patrocinado, sin motivo alguno, una suerte de golpe de Estado civil para romper la casa de todos. En un país normal, que cree en sí mismo, Rajoy y Sánchez conversarían tres o cuatro horas y a continuación sus equipos prepararían un documento conjunto, suscrito por los dos grandes partidos españoles en el marco solemne de La Moncloa. El presidente y el líder de la oposición comparecerían juntos, en una alocución a la nación, y dirían, más o menos, lo siguiente:

–PP y PSOE consideran que la unidad de España es un bien innegociable, pues la soberanía nacional reside en todos los españoles y no en sus políticos.

–PSOE y PP estiman que la Constitución democrática de 1978, aprobada por una mayoría amplísima, ha traído a España una prosperidad sin precedentes y es un marco absolutamente válido, por lo que no ha lugar a enmendarla ni ponerla en solfa.

–PSOE y PP quieren recordar que el actual Estado de las Autonomías es ya un modelo federal y que España está entre los países más descentralizados del mundo. Hablar de federalismo es un juego semántico.

–PP y PSOE advierten al presidente de la Generalitat que su desafío sectario carece de cauce legal, que daña la convivencia entre españoles y que la independencia resultaría terriblemente regresiva para Cataluña y el resto de España. También recuerdan al señor Mas que es el presidente de todos los catalanes, incluidos los que no son nacionalistas, y que al convertir sus deseos partidistas en la supuesta opinión de toda Cataluña está suplantando al pueblo catalán.

–PSOE y PP recalcan que Cataluña cuenta y ha contado en todo momento con la colaboración solidaria del Estado, cuyo soporte económico ha permitido que la Generalitat siga ofreciendo sus servicios y pueda colocar su deuda.

–PP y PSOE acuerdan definir un nuevo modelo de financiación autonómica, que conserve el principio innegociable de la solidaridad entre regiones, cimiento de cualquier Estado moderno. El nuevo modelo no se aborda como respuesta a un desafío ilegal, sino porque el actual se ha quedado obsoleto, toda vez que las comunidades han asumido el grueso de los servicios.

Dicho todo esto, Sánchez y Rajoy se dan la mano, el país se va a dormir tranquilo, el globo de Mas comienza a desinflarse, el electorado españolista del PSOE –que es casi todo– se reconcilia con su desnortado partido y los palmeros tertulianescos de la tercera vía empiezan a entender que lo patriótico es otra cosa y toca recular.

Pero todo eso sucede en los países normales. Aquí Sánchez irá a La Moncloa a soltar la milonga federalista, que ni él mismo entiende y que se basa solo en no coincidir en nada con el PP. Mas aprovechará las fisuras para hacer más propaganda y sacar pecho. El problema se enquistará. Y el Gobierno, como siempre, perderá la batalla dialéctica, porque si no te explicas jamás puedes convencer.

LUIS VENTOSO, ABC – 24/07/14