Enmienda testimonial

Editorial, EL CORREO, 1/9/11

La propuesta del PNV de constitucionalizar la autodeterminación está abocada al fracaso

La doble enmienda con la que el PNV ha decidido responder a la reforma constitucional pactada por el PSOE busca reflejar, por una parte, la disconformidad de los jeltzales con que se solemnice en la Carta Magna la contención del déficit y el modo en que los dos grandes partidos han promovido esa modificación; y, por otro, «constitucionalizar» el reconocimiento del derecho de autodeterminación. En lo que se refiere estrictamente al cambio propuesto en el artículo 135 de la Carta Magna, los peneuvistas plantean que, junto al Estado y las Comunidades Autónomas, se citen expresamente los Territorios Forales como salvaguarda de la singularidad fiscal vasca. Una propuesta que resulta congruente con el respeto a los derechos históricos consagrados por el propio texto constitucional en su disposición adicional primera y que, por tanto, debería ser tomada en consideración. No obstante, es llamativo que el PNV haya limitado a esa precisión su legítimo rechazo a una reforma constitucional que, en palabras de su portavoz en el Congreso, Josu Erkoreka, constituye un «atropello» para las minorías y esconde un «impulso recentralizador». Aunque aún resulta más paradójico que, rechazando la modificación constitucional en los términos en los que lo han hecho, los jeltzales traten de introducir en el debate otra enmienda, esta de adición, para oficializar el derecho de autodeterminación en la Carta Magna. La iniciativa no solo tropieza con dudas formales sobre el procedimiento escogido, sino que se mueve conscientemente en un terreno simbólico y testimonial dado que está abocada al fracaso. Si el PNV considera llegado el momento de reavivar la reivindicación del derecho a decidir, el marco adecuado es el Parlamento vasco en consonancia con las reglas establecidas, el acuerdo de 1990 de la Cámara en que basa su argumentación el partido de Urkullu y la literalidad de su enmienda en la que deja en manos de las instituciones de Euskadi el impulso al ejercicio de la autodeterminación.

Editorial, EL CORREO, 1/9/11