Pese a pactar en el Congreso una treintena de enmiendas a la ley Integral de Víctimas del Terrorismo, donde se incluye el compromiso del Estado de perseguir «la derrota definitiva, incondicional y sin contrapartidas» de ETA, los socialistas parecen empeñados —al menos en el País Vasco— en contravenir los valores de la unidad contra el terrorismo.
El encuentro de ayer entre representantes del Partido Socialalista de Euskadi y Bildu no es razón para la sorpresa. Si los socialistas vascos negociaron con la Batasuna ilegal durante la tregua de ETA entre 2005 y 2007, con mayor motivo lo harán con una formación avalada por el Constitucional y cuya presencia en las instituciones fue defendida por Patxi López antes del 22-M. Tampoco debe mover a la extrañeza que, tras la reunión, ambas partes se mostraran dispuestas al entendimiento. El socialismo vasco nunca ha renunciado a un escenario en el que la mayoría nacionalista fuera sustituida por una mayoría de izquierda, similar a la fórmula del tripartito catalán con ERC. La degradación de la política vasca avanza de manera imparable con la legitimación de Bildu en todos los órdenes, incluso con expectativas de pactos con un partido, el PSE, que gobierna en el País Vasco con el apoyo del PP.
Pese a pactar en el Congreso una treintena de enmiendas a la ley Integral de Víctimas del Terrorismo, donde se incluye el compromiso del Estado de perseguir «la derrota definitiva, incondicional y sin contrapartidas» de ETA, los socialistas parecen empeñados —al menos en el País Vasco— en contravenir los valores de la unidad contra el terrorismo, porque regalar a Bildu una fotografía de normalidad democrática es un grave error y una deslealtad al PP. Las explicaciones formalistas del encuentro con Bildu son tan mendaces como las que ofreció el PSE cuando en 2006 se reunió con la «izquierda abertzale», también teledirigida por ETA. Fue el actual ministro del Interior y precandidato socialista, Pérez Rubalcaba, quien afirmó que «Bildu está en la estrategia de ETA». Por eso convendría saber qué piensa él y hasta dónde van a llegar los socialistas vascos con este acercamiento a Bildu, porque están llevando el pacto con el PP a un punto crítico.
Editorial en ABC, 1/6/2011