Del blog de Santiago González
En el penúltimo fraude del año, Pedro Sánchez hizo una consulta sobre asuntos particulares al corrupto al que puso a gestionar el CIS, José Félix Tezanos: Quién le convenía más para encabezar la candidatura del PSC a las autonómicas catalanas. Y el fiel Tezanos le dijo que Salvador Illa tenía mejor imagen que Miquel Iceta. Qué quiere decir mejor imagen y qué quiere decir Tezanos. Illa se despidió mintiendo, que es lo que ha hecho sin descanso en lo que llevamos de año. 24 horas antes de conocerse la noticia él se descartó como candidato en TVE y anunció en el mi9smo medio que el candidato socialista a presidir la Generalidad iba a ser Iceta; es lo que le faltaba a Rosa María Mateo: que el Gobierno interviniera para aumentar el crédito de la santa casa.
En realidad, era un secreto de voces desde hace tiempo. El fabuloso head hunter (¡y futurólogo!) puso a Illa a dirigir la Sanidad porque no iba a tener tajo y eso le permitiría tiempo libre y popularidad como candidato. En mi columna del 3 de octubre lo comenté en este párrafo:
“¿Por qué Salvador Illa, ese improbable ministro de Sanidad va al BOE con una resolución de su Secretaría de Estado y no con una Orden Ministerial? Uno cree que el Gobierno debería tener autoridad para imponer a las CCAA sus decisiones en casos como este. Como si dijeran la verdad en algo, en el número de muertos, un suponer, en las mascarillas, en el inexistente comité de expertos o como si el objetivo fundamental de su acción fuese el bien común de los españoles y no dotarse de una herramienta contra el adversario o construirse un currículo que lo avale como candidato a la Generalidad. ¡El tío que confinó Madrid!¡Y sin tener ni puta idea de Medicina, que no es mérito menor!”
Donde se ve la naturaleza corrupta del candidato. ¿Recuerdan que también mintió un comité de expertos imaginario? Bueno, pues en este párrafo se ve una más: hacerse campaña como catalán castigando a Madrid.