FLORENCIO DOMÍNGUEZ, EL CORREO 21/01/14
· El 80,2% de los etarras apoya la renuncia al terrorismo, la misma cifra que en 2008 apostó por seguir con la violencia.
La circular interna elaborada por la dirección de ETA e intervenida en la última operación policial de la Guardia Civil deja claro que la banda no tiene la menor intención de disolverse. La circular recoge las mismas ideas que estaban planteadas en los dos documentos que sirvieron para el debate interno y señala que ETA se reestructurará para realizar «funciones y labores políticas».
Las peticiones de la mayoría de los partidos para que ETA se disuelva definitivamente caen en saco roto cuando el documento etarra refleja la voluntad del grupo de pervivir, aunque ahora sea sin realizar atentados. No queda claro cuál es el propósito de esa supervivencia. No se sabe si pretende mantener una suerte de tutela o vigilancia sobre la izquierda abertzale o si los etarras no son capaces de dejar morir sus siglas y pretenden conservarlas para seguir actuando como un ‘lobby’ de presión política.
El documento intervenido confirma que se ha ratificado –con dos años de retraso– la renuncia al terrorismo. Habrían aprobado esa decisión el 80,2% de los que han participado en el debate y la votación, frente al 4,2% que habría votado en contra. Otro 15,6% se ha abstenido o no ha participado en las votaciones, según señala la circular. El documento no precisa cuántos han participado en ese debate y en las votaciones, pero no deja de ser significativo que el calendario de aprobación se retrasara un año porque no habían conseguido «un número suficiente de aportaciones», según comunicó la dirección de ETA en diciembre de 2012.
Curiosamente, el porcentaje de partidiarios de renunciar al terrorismo es exactamente el mismo que en 2008 votó lo contrario y se pronunció en otro debate a favor de continuar con la violencia. En aquella ocasión, los partidarios de seguir con las armas fueron el 80,5% de los que participaron en el debate, frente al 15,5% que estaba en contra y al 4% que se abstuvo. De aquel debate se tienen algunos datos más que del actual. En la primera fase del debate participaron 210 miembros de ETA que presentaron un centenar de aportaciones, según una circular de la dirección etarra de marzo de 2008. Supondrían algo más de un tercio de los efectivos de la organización terrorista. No se sabe cuántos votaron luego pero la dirección de ETA reconoció, en otra circular de noviembre, que «a pesar de que muchos compañeros hayan hecho aportaciones y reflexiones, no han votado. Han dejado su confianza en manos de su dirección o de la Organización».
No deja de llamar la atención que ante cuestiones tan relevantes para una organización terrorista como es la continuidad o no de la violencia la participación en los debates sea limitada y no concite el interés de la mayoría de los miembros de ETA. De todas formas tampoco parece que importe demasiado porque los integrantes de la banda terrorista están más acostumbrados a obedecer órdenes de los jefes que a participar en debates. Y los jefes, hace dos años, decidieron poner fin al terrorismo. Ahora los militantes de a pie han ratificado lo acordado entonces.
FLORENCIO DOMÍNGUEZ, EL CORREO 21/01/14