El director operativo de la Policía durante los últimos años desvela en esta segunda parte de su entrevista exclusiva con EL MUNDO que dio la orden de volver a investigar tres grandes casos que, pese a haber sido juzgados y sentenciados, considera que pueden no haberse resuelto correctamente. Eugenio Pino (Oropesa, Toledo, 1951) asegura que encargó a una unidad específica compuesta por «12 o 13 personas» averiguar qué había pasado en el 11-M, el Faisán y el crimen de Marta del Castillo. El resultado son tres voluminosos informes que la Policía mantiene en secreto y que Pino pide que sean «desclasificados» porque cuestionan algunos de los pilares de las sentencias. «La verdad tiene muchos puntos de vista», advierte.
Pregunta.– ¿Sabe ya usted quién organizó el atentado del 11-M?
Respuesta.– Yo encargué a la Brigada de Resolución de Casos que hiciera un informe y ahí está. Le encargué lo del Faisán, y ahí está. Encargué lo de Marta del Castillo, porque no se puede permitir que un Estado no entregue el cadáver a un padre de una hija muerta. Hay que hacer todo lo posible y poner todos los medios. Y si unos no pueden, que vengan otros con otra perspectiva. En medicina siempre se pide la segunda opinión: «Oiga, yo tengo un problema y vamos a ver si tiene razón».
P.– ¿Puede desvelar algo de esos tres informes?
R.– Ahí están y como son causa juzgada, deberían ser públicos. He leído estos días que la CIA ha desclasificado un montón de informes. La Policía puede hacerlo perfectamente con aquello que está juzgado y que pueda tener una marcha atrás. Yo no tendría ningún inconveniente, pero como ya no estoy ahí… Se trata de un método de trabajo distinto, no se trata de cuestionar el trabajo anterior, es un atisbo de modernidad.
P.– ¿El informe del 11-M contradice la resolución judicial?
R.– No contradice la resolución judicial, pero da por sentado, según tengo entendido, porque no lo he leído, algunas cosas que fueron determinantes para argumentar una serie de teorías que verdaderamente se diluyen. Se aclaran algunas cosas que estaban en una nebulosa.
P.– Entonces pone en cuestión algunos pilares de las sentencias…
R.– Algunas cosas, igual que la del Faisán. En este último caso se aclaran algunas responsabilidades. Se ha hecho un trabajo magnífico, yo me he quedado alucinado. Viendo las redes, la conexiones, con un programa que es maravilloso. Lo de Marta del Castillo, pues la Policía sabe quién mató pero no hemos recuperado el cadáver. Es un fracaso. Ese padre se despertará todos los días exigiendo el cadáver, con toda la razón del mundo, porque el Estado tiene que entregárselo. Hasta que este señor de la cárcel diga dónde lo puso… Yo sería partidario de usar el detector de mentiras y esas cosas que usan otros países y no sé por qué no hacemos.
P.– Durante su mandato la Policía también elaboró varios informes en los que se denunciaba que Podemos se ha financiado irregularmente. Si tienen ustedes las pruebas que lo acreditan, ¿por qué este asunto no ha prosperado judicialmente?
R.– Ha habido gente de todos los lugares y de todos los sitios que nos ha contado cosas. Hay un país que se llama Venezuela donde la información es a chorros. No se puede comprobar porque hay que ir para allá, pero hay ministros e incluso algún testigo protegido. Mucha gente ha venido a contarnos cosas y nos ha dado hasta fotos de todo lo que está ocurriendo en Venezuela.
P.– ¿Mantiene entonces que Podemos se ha financiado ilegalmente con dinero procedente de Irán y de Venezuela?
R.– Yo, a título particular, creo que sí, pero no lo puedo demostrar.
P.– Con respecto a su líder, Pablo Iglesias, sus informes apuntaban a que tiene cuentas en paraísos fiscales. ¿También lo mantiene?
R.– Hay una información que nos viene de Venezuela en ese sentido y nosotros evidentemente la metemos en la unidad de investigación. Luego no se continúa o está en proceso de investigación. Ya se verá. Pero nuestros informes no debían ser muy falsos cuando nuestros confidentes están recibiendo amenazas.
P.– ¿Considera entonces que esa información es buena, al igual que afirma con la cuenta suiza del ex alcalde de Barcelona Xavier Trias?
R.– Es una información, no puede decirse si es buena o mala. Cuando tienes el papel y te lo reconoce el banco, como es el caso de la banca andorrana de la familia Pujol, evidentemente [es buena].
P.– Precisamente se está investigando en Andorra cómo obtuvieron ustedes la información bancaria de la familia Pujol. Una de las entidades financieras, la Banca Privada de Andorra (BPA), asegura que fue coaccionada por ustedes. ¿Eso es cierto?
R.– Para nada.
P.– ¿Utilizaron fondos reservados para obtener esa información?
R.– Para nada. Vamos a ver, ellos pidieron un apoyo con respecto a un servicio extranjero muy poderoso para que habláramos bien de ellos. A cambio de eso, nos dieron esto.
P.– ¿Cómo explica que los Cierco, propietarios de la BPA, estén utilizando en estos momentos contra la Policía notas informativas del comisario José Manuel Villarejo que apuntan a posibles irregularidades?
R.– Habrá que preguntarle al señor Villarejo.
P.– ¿Se ha cambiado de equipo este comisario? ¿El mismo que investigaba a la familia Pujol ahora trabaja para anular la causa?
R.– Villarejo no ha investigado nunca la corrupción en Cataluña. Se limitó a traer a Javier de la Rosa para que se le tomara declaración. Que me conste no ha vuelto a investigar nada en Cataluña. Él se ha dedicado a otras cosas. Si investigar la corrupción en Cataluña es irse a Argentina a ver a Gustavo Shanahan [testaferro del clan catalán], pues sí. Pero ha hecho otras cosas de terrorismo.
P.– Cuando Jorge Fernández Díaz dijo en sede parlamentaria que Villarejo ha prestado «grandes servicios al Estado», ¿a qué se refería?
R.– Se refería a una relación internacional sobre el terrorismo árabe.
P.– Con respecto a la amenaza terrorista en nuestro país, ¿cuál es la situación en estos momentos?
R.– Es mejor no decir absolutamente nada. Y si me permite la expresión castiza, virgencita, virgencita, que me quede como estoy. Tenemos riesgo de atentado como en toda Europa y en todo el mundo. Sobre eso no me quiero pronunciar porque cualquier triunfalismo… Las cosas se están haciendo bien. Se podrían hacer mejor pero también se podrían hacer peor. Ser ahora victoriosos es muy complicado.
P.– La Policía practicó recientemente la detención de una supuesta célula yihadista que se anunció que iba a atentar en la Puerta del Sol de Madrid. El juez ha dejado a todos los integrantes de este comando en libertad. ¿Se exageró la operación?
R.– Sobre el terrorismo árabe, como ocurre con la corrupción, la Policía es bombardeada muchas veces con muchas informaciones. Hay que tener mucha capacidad de análisis para ver cuál es buena y cuál es mala. Siempre hay informaciones interesadas. Luego hay gente que quiere perjudicar o ganarse apoyos y dice cosas que son verdades a medias.
P.– La Policía también se ha visto envuelta en polémica los últimos años por los escándalos de corrupción del PP. Usted no vivió el caso Gürtel pero sí vivió el de Bárcenas. ¿La Policía puso en marcha un dispositivo para averiguar qué material tiene todavía el ex tesorero del PP?
R.– Estuvimos investigando las noticias que decían que había dinero en una serie de paraísos y una serie de cuentas. Esa fue la participación que hemos tenido nosotros. Hemos tenido alguna operación sobre gente que salía de la cárcel con algún mandato del señor Bárcenas.
P.– Como por ejemplo acceder a una nube informática que guardaba documentos del ex tesorero…
R.– Exactamente. Pero eso quedó en nada, en agua de borrajas. Así trabaja la Policía. De cien casos te sale una. Era un estafador, ¿eh?
P.– ¿Cree que Bárcenas tiene realmente pruebas sensibles contra el PP o cree que cuando lo ha dicho estaba jugando de farol?
R.– Vaya usted a saber porque todo el mundo graba a todo el mundo en este país. Cuéntemelo a mí…
P.– La última víctima de la guerra policial ha sido el comisario García Castaño, relevado como responsable de las escuchas policiales.
R.– Ha sido un gran profesional que ha prestado grandes servicios al Estado en materia de terrorismo. La Policía necesita gente como él.