ABC – 16/10/15
· El titular de Sanidad asumió el liderazgo el miércoles con el respaldo del presidente.
El relevo en la presidencia del Partido Popular vasco, que recae en Alfonso Alonso tras la dimisión de Arantza Quiroga, se fraguó, según pudo saber ABC, en la noche del miércoles al jueves, durante una cita que reunió a los tres barones alaveses: el propio Alonso, Javier Maroto y Javier de Andrés. Fue en ese encuentro donde el ministro de Sanidad y líder provincial dijo que daría el paso adelante de asumir el liderazgo si contaba con la autorización del presidente del partido. Mariano Rajoy dio su visto bueno.
La dirección nacional del partido estaba muy interesada en cerrar este episodio cuanto antes; ya el martes, desde la cúpula se pudo empujar a Alonso a aceptar, dado que reunía las condiciones idóneas: conoce el PP en el País Vasco, tiene peso político y será capaz de pacificar aquel polvorín para las autonómicas de otoño.
Cerrar el círculo
Una vez cerrado el acuerdo, ayer Alonso se puso en contacto con los presidentes guipuzcoano, Borja Sémper, y vizcaíno, Antón Damborenea, que no pusieron ninguna objeción. Acordado el relevo, que esta tarde recibe el cuño oficial de la junta directiva que se celebra en Bilbao, la cúpula del PP vasco escenificó en el Parlamento autonómico el final de la crisis.
Alonso acudió a mediodía, flanqueado por Maroto y De Andrés, y avanzó que a lo largo de la jornada habría fumata blanca. Dos horas después se hacía público. Se cerraba el círculo, pues fue Alonso quien trazó a Quiroga las líneas rojas de su proyecto de convivencia y libertad. La retirada de la moción fue el inicio de un seísmo que hizo ver a la expresidenta que su aislamiento era casi total.
El organigrama directivo de la formación no sufrirá cambios. La vizcaína Nerea Llanos, ratificada como secretaria general por Alonso, continúa en el cargo para mantener los equilibrios territoriales. El nuevo presidente del PP vasco, siguiendo el ejemplo de José Manuel Soria en Canarias, compaginará el cargo con la cartera de Sanidad. No será una situación nueva para él: como líder en Álava, los viernes, al concluir el consejo de ministros, ha estado regresando a Vitoria para asumir tareas del partido durante el fin de semana.
Desde el PP se hace hincapié en que Alonso aportará su amplia experiencia, capacidad negociadora y mayor rigor y madurez que Quiroga. Ayer mismo señaló el trabajo para las elecciones generales como la «prioridad» inmediata y fijó sus líneas maestras: «Quiero un PP en el País Vasco centrado, que defienda las ideas que hemos tenido, que nos han unido siempre en la defensa de la España constitucional, de un País Vasco con personalidad propia, con su concierto económico, con sus singularidades forales en cada uno de los territorios».
ABC – 16/10/15