Ibarretxe asegura que «soplan vientos a favor del derecho a decidir»

DIARIO VASCO, 28/9/12

El exlehendakari aboga en la presentación de su libro por propiciar un cambio constitucional que abra la puerta a «refundar el Estado»

Hace poco más de una semana, el candidato del PNV a Ajuria Enea, Iñigo Urkullu, adelantó su intención de «rescatar» elementos y competencias del «nuevo estatuto político para Euskadi» de 2004 e incorporarlos a una propuesta de reforma del marco estatutario. Ayer, este propósito entró de lleno en la precampaña y lo hizo de la mano de su impulsor, Juan José Ibarretxe. El exlehendakari presentó en la sede de la Fundación Sabino Arana su libro ‘El caso vasco. El desarrollo humano sostenible’, un acto que sirvió al exdirigente jeltzale para resucitar su plan como un activo a tener en cuenta, no solo para en caminar «la profundización del autogobierno», sino también hacia «un cambio constitucional que permita la refundación del Estado». «Soplan vientos a favor del derecho a decidir», expresó.

Ibarretxe estuvo acompañado por buena parte de la plana mayor del PNV, incluido el propio Urkullu, que protagonizó un efusivo abrazo con su antecesor y permaneció sentado en primera fila sin realizar declaración alguna. El exlehendakari resumió el contenido de su libro en diez epígrafes, buena parte de ellos destinados a defender «desde el más estricto respeto a la esencia democrática, el derecho del pueblo vasco a decidir su propio futuro y el compromiso de ejercerlo por la vía del pacto y la negociación». «Esa es la llave de la solución», proclamó. Ibarretxe se mostró convencido de que «el problema de la normalización política no estriba únicamente en un compendio de transferencias», sino en la «falta del reconocimiento de Euskadi como sujeto político con identidad propia al que le corresponden unos derechos históricos».

La tela de araña del Estatuto

Ibarretxe recordó -así lo recoge su publicación- que los «incumplimientos» y las «carencias» del Estatuto de Gernika son «abrumadores». «Ha perdido funcionalidad a pasos agigantados», hasta el punto de que, según añadió, «se ha extendido la convicción de que está agotado». «La tela de araña que se ha tejido y continúa tejiéndose en torno al mismo ha conseguido encorsetar su interpretación, impedir su desarrollo; en definitiva, se ha reafirmado una visión centralista que ha derrumbado la idea del Estado plurinacional, de la sociedad plurinacional», lamentó. En este sentido, advirtió que «la segunda transformación de Euskadi es solo superable con un nuevo marco institucional».

El exdirigente jeltzale abogó por «lograr, desde el respeto mutuo y en el marco de la Unión Europea, un acuerdo para la convivencia amable entre Euskadi y el Estado español», que se adapte a los nuevos tiempos. Es decir, a los cambios habidos en las tres décadas pasadas en el campo político, económico, social e institucional. Según subrayó Ibarretxe, el debate sobre el modelo de Estado «no es un tema tabú», sino que «está en la agenda de hoy».

«El autogobierno es la clave de la estrategia de país, ha sido sinónimo de bienestar para la sociedad vasca», sostuvo el exlehendakari. Advirtió de que el rechazo del «Gobierno y las Cortes españolas, sin negociar siquiera», a las propuestas del nuevo estatuto político y la celebración de una consulta democrática no vinculante, así como lo ocurrido con el Estatut catalán, «han puesto sobre la mesa la necesidad de refundar el Estado y el imprescindible cambio constitucional para propiciarlo». «El irrespeto político y jurídico que han exhibido no son síntoma de fortaleza sino de debilidad», censuró.

Ibarretxe reiteró su apuesta por un nuevo marco legal, puesto que «el actual supone una limitación para aumentar los niveles de competitividad», que lleven a un mayor autogobierno. «Si no se alcanzan acuerdos, este debate seguirá estando presente en los próximos años, y con mayor virulencia política social», remarcó. Según apostilló, existe un «binomio en el mundo: O me respetas o me marcho».

El exlehendakari consideró que ETA «debe comprender la terrible brutalidad, inutilidad e inmoralidad de su violencia y dar pasos inequívocos que muestren su disposición a abandonarla definitivamente para siempre, y sin reservarse papel garante de proceso político alguno». Con respecto a la paz y normalización, Ibarretxe señaló que «la experiencia nos ha enseñado que solo hay un camino, un método para avanzar: el diálogo».

DIARIO VASCO, 28/9/12