La CUP salva a Puigdemont para evitar elecciones

EL MUNDO – 06/09/16

· Anna Gabriel anuncia que votarán a favor del ‘president’ en la cuestión de confianza.

· La CUP no ha querido esta vez alargar la intriga hasta el último minuto y ayer anunció que dará apoyo a Carles Puigdemont en la cuestión de confianza convocada para el 28 de septiembre.

El presidente catalán superará así ese trance y evitará la convocatoria de unas nuevas elecciones en Cataluña, en un momento en que el Govern presume de haber eludido un escenario de bloqueo como el del Congreso de los Diputados.

La reunión que Puigdemont mantuvo el pasado viernes con tres dirigentes de la CUP –las diputadas Anna Gabriel y Mireia Boya, y el miembro del secretariado Dani Corpas– sirvió para desbloquear la situación. La encargada de anunciarlo fue Gabriel, que dijo en TV3 que «los diputados de la CUP darán la confianza para que culmine la legislatura con los objetivos que se plantearon», es decir, la culminación del proceso independentista.

Además, Puigdemont ha conseguido el visto bueno de la CUP –imprescindible para alcanzar la mayoría independentista en el Parlament– sin tener que prometerles que el año que viene promoverá un referéndum unilateral de independencia, como piden los antisistema. En cualquier caso, el president parece bastante de acuerdo con esa idea, al contrario que Artur Mas y su entorno, que entienden que una iniciativa de ese cariz dejaría en evidencia la ineficacia de la consulta del 9–N de 2014, por la que el ex presidente de la Generalitat está imputado.

Anna Gabriel explicó que en su encuentro con Puigdemont constataron su voluntad de culminar esta legislatura con los objetivos con los que se inició, recogidos en la hoja de ruta, que prevé la celebración de unas elecciones «constituyentes» y de un referéndum para votar una «constitución catalana».

Pese a que ya no lo considera una condición, la diputada de la CUP siguió defendiendo la convocatoria de un referéndum de autodeterminación, que sería «unilateral» porque, en su opinión, las instituciones españolas obligan a ello, al no querer negociar una votación a la escocesa. Ante los problemas que presenta la fórmula –el principal: es más que probable que los no independentistas no se sintieran llamados a votar, como ya sucedió en el 9-N–, Gabriel no ofreció soluciones, pero dijo que podrían solventarse «con determinación».

Los partidos que forman Junts pel Sí, el PDC y ERC, se felicitaron enseguida del anuncio de Gabriel. El líder de Esquerra y vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, dijo que el próximo paso será convocar a la CUP para negociar los presupuestos de la Generalitat de 2017. El Ejecutivo catalán no quiere que suceda como en julio de este año, cuando los antisistema acabaron tumbando las cuentas en el Parlament y propiciando la convocatoria de la cuestión de confianza.

Junqueras insistió en que la cuestión de confianza y los presupuestos están vinculados, porque «no tendría ningún sentido superar la cuestión de confianza» y que los presupuestos de 2017 no prosperaran, dijo.

El PDC, la antigua Convergència, es de la misma opinión. La coordinadora general del partido, Marta Pascal, instó a la CUP a ofrecer también un «compromiso claro» con los presupuestos porque, de no ser así, la hoja de ruta quedaría «coja».

La decisión de la CUP llega a pocos días de la celebración de la Diada, cuyo acto principal contará este año con la presencia de Ada Colau. La alcaldesa de Barcelona compartirá pancarta con el secretario general de Podemos en Cataluña, Albano Dante Fachín. Pese a que la manifestación es claramente independentista, ambos han anunciado que participarán para reflejar que hay una «alternativa» a la hoja de ruta de Junts pel Sí, que «no comparten», ven «confusa» y creen que «no conduce a ninguna parte».

La mayor parte del independentismo celebra la presencia de Fachín y, sobre todo, de Colau en la manifestación del domingo. Pero ni siquiera los actos de la Diada están libres de enfrentamientos internos en ese campo: ayer, el PDC se quejó de que no se les haya invitado a una manifestación anterior, la que se celebrará el viernes en Sant Boi (Barcelona) y que unirá a los principales dirigentes de ERC, la CUP y Podemos en Cataluña.

La coordinadora general del PDC criticó ayer que se les haya «excluido», y alertó de que tras ese acto conjunto podría encontrarse la voluntad de repetir lo que fue la peor pesadilla de Convergència, la «tentación de un posible tripartito» de izquierdas.

ESCEPTICISMO DE LA OPOSICIÓN

Estabilidad. «Cuando uno tiene un planteamiento tan radical, como el que defiende la Generalitat de saltarse las leyes y declarar la independencia, con los únicos con los que puede pactar es con los señores de la CUP, pero esto no da estabilidad», sostuvo Inés Arrimadas (C’s).

Fracaso. Miquel Iceta (PSC) insistió en la misma idea: «Sin duda, los precedentes no dan una esperanza de estabilidad en el Govern con una hoja de ruta basada en supuestos equivocados y condenada al fracaso».

Fractura. Tras reunirse ayer con Puigdemont, Xavier García Albiol (PP) dijo: «Veo a un presidente muy decidido a seguir adelante con un camino que lleva a fracturar y dividir a la sociedad catalana».

EL MUNDO – 06/09/16