Daniel Lacalle-El Español
«There are some more of us living here, we are called Legion». Neal Morse.
Cuba es una dictadura que usa el terror y la propaganda para reprimir a su pueblo. Lo encierra, silencia y enfrenta a familias usando la extorsión y la amenaza. Las prácticas constantes de detención ilegal, ruina por discrepancia política, señalamiento y limitación de los derechos fundamentales no tienen nada que ver con ningún bloqueo ni embargo y todo que ver con el régimen totalitario comunista.
Toda la propaganda que blanquea a la dictadura comunista liberticida está basada en dos mentiras: el «bloqueo» y la «sanidad pública cubana».
Cuba solo sufre un bloqueo: el de la dictadura contra su pueblo, al que le limita las importaciones de alimentos, medicinas, uso de internet y libertad de viajar. La evidencia la hemos visto esta semana cuando han «levantado temporalmente» la limitación de importación de alimentos y medicinas.
Desmontar la mentira de los excelentes servicios públicos cubanos es fácil. Solo hay que ir a Cuba y verlo.
Desmontar la mentira de los excelentes servicios públicos cubanos es fácil. Solo hay que ir a Cuba y verlo
La sanidad que tanto publicita el régimen es un sistema fallido y ruinoso que solo da servicio de calidad a los extranjeros ricos y a los líderes del régimen. Cuba sufre la «sanidad gratuita más cara del mundo», como me decían en La Habana.
El mito de la calidad de la sanidad se ha desmontado en varias ocasiones. María Werlau, de la ONG Archivo Cuba explicaba que «la sanidad en Cuba es pésima para el ciudadano de a pie. Existe un apartheid que favorece a la élite gobernante y a los extranjeros que pagan en dólares», y se ha demostrado que «el sistema de salud cubano carece de transparencia y capacidad”, y sus políticas de salud no solo no han dado buenos resultados sino que se limitan derechos básicos de los pacientes, “difícilmente es un modelo a seguir» (Cuba’s health system: hardly an example to follow, Octavio Gómez-Dantés).
Cualquiera que viaje a Cuba puede ver que la tan repetida «inexistencia de desnutrición infantil» que algunos dicen que muestra Unicef, solo enmascara un régimen que está aún bajo el yugo de las cartillas de racionamiento y la miseria.
Pero es que Unicef «no indica eso en absoluto, sino que la incidencia de peso inferior al normal ha bajado al 4%», un récord roto por Chile, por ejemplo, que llegó al 1%. En Tracking Progress on Child and Maternal Nutrition: A survival and development priority (Unicef, noviembre de 2009, p. 102 y ss.) y se muestran indicadores con cifras similares. Es decir, nada de erradicar, y Chile, por ejemplo, muestra mejores cifras.
El dato real de mortalidad infantil es el doble del oficial (11,16 vs 5,79) y mucho peor que en países como Chile o Costa Rica, según estudios de la Universidad de Carolina del Norte y otras entidades.
El mito del bloqueo es todavía más hilarante. ¡La izquierda echa la culpa de los males de Cuba a que no tiene suficiente libre comercio!… mientras, nos dice que hay que defender la autarquía y limitar el comercio en nuestros países.
El mito del bloqueo es una mentira que sirve como excusa para blanquear a la dictadura.
El mito del bloqueo es una mentira que sirve como excusa para blanquear a la dictadura
El comercio internacional de Cuba sobre PIB fue el 27% del PIB en 2020, comparado, por ejemplo, con Brasil que es un 32%. Sus exportaciones son el 14,5% del PIB comparado con el 16% de Brasil (datos Banco Mundial).
Estados Unidos es el noveno mayor socio comercial de Cuba, con el 3% de las importaciones. Cuba tiene más de 27 tratados bilaterales con más de 90 países y exporta a Canadá (22%), China (21%), Venezuela (13%), España (11%), Holanda (7%), Alemania, Bélgica, Suiza, Chipre (2% cada uno) y Francia (1%) entre otros (Oficina de Estadística de Cuba, edición 2020).
Las exportaciones de alimentos y productos agrícolas de Estados Unisdos a Cuba aumentaron un 74,7% en marzo de 2021, un aumento del 54,3% anualizado (Cuba Trade).
Cuba, a su vez, importó en 2020 de Venezuela (crudo a precio de coste o regalado, además), China, España, Rusia, México, Italia, Argentina, Brasil, EEUU y Alemania entre otros. Vaya porquería de ‘bloqueo’.
Lo único que tiene Cuba es un embargo de aquellas partidas que el régimen dictatorial usa para fines militares.
Lo que la izquierda oculta sobre el embargo: El embargo se implementó en 1958 ¡con el régimen de Batista! para limitar la venta de armas. El embargo a las exportaciones de EEUU a Cuba de 1960 no incluyó alimentos ni medicinas. Desde el año 2000 no existe ningún tipo de embargo a exportaciones de EEUU ni en alimentos ni en medicinas.
Más de 90 multinacionales norteamericanas exportan a Cuba desde 2001. Desde 2014 sesenta empresas norteamericanas están operando directamente en Cuba (Cuba Trade Economic Council)
Cuba exportó a Estados Unidos 14,9 millones de dólares e importó 176,8 en 2020 (Departamento de Estado). Las importaciones y exportaciones a China son, además, muy importantes.
Estados Unidos es el mayor proveedor de alimentos y productos agrícolas a Cuba, según el Departamento de Estado, con exportaciones de esos bienes valoradas en 220,5 millones de dólares en 2018. Estados Unidos también es un importante proveedor de bienes humanitarios a Cuba, incluidos medicamentos y productos médicos, con valor total de 275,9 millones de dólares en 2018. Las remesas de los Estados Unidos, estimadas en 3.500 millones de dólares en 2017 son la mayor fuente de divisas de la dictadura.
Lo que ha hundido a Cuba es el comunismo. Un régimen dictatorial destructor y dilapidador de subvenciones.
El régimen castrista es una máquina de dilapidar subvenciones. Dilapidó ayudas de la Unión Soviética entre 1960 y 1990 equivalentes a seis planes Marshall y no consiguió mejorar su patrón de crecimiento ni aprovechar las enormes subvenciones para mejorar la productividad. Entre 1960 y 1990, Cuba recibió más de 65.000 millones de dólares de la Unión Soviética, sin contar los que recibió de otros países socialistas.
La dictadura cubana también ha dilapidado las subvenciones y ayudas de China, Rusia y Venezuela.
La dictadura cubana también ha dilapidado las subvenciones y ayudas de China, Rusia y Venezuela
Solo en el programa de médicos cubanos, Misión Barrio Adentro, el poder de La Habana recibió 120.000 millones de dólares en 16 años, una cifra oficial, revelada por Nicolás Maduro en 2019, y confirmada por Julio García, jefe de las misiones cubanas en Venezuela.
Cuba obtuvo más dinero de Venezuela por otros conceptos, otras misiones, por ventas de plantas eléctricas, por triangulación en las importaciones de alimentos, y hasta por la venta de millones de bombillas.
En los últimos 18 años, China ha perdonado casi $5.000 millones en deuda a Cuba, casi la mitad de la deuda total que ha perdonado a sus socios comerciales. Eso sí, el comercio con China ha bajado por los constantes impagos del régimen dictatorial cubano.
Rusia ha donado miles de millones de dólares a Cuba, con donaciones través, por ejemplo, de la representación del Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el perdón del 90% de la deuda contraída (2014), unos 25.800 millones de dólares.
Entre 2011 y 2014 solamente, México, Japón, China y Rusia juntos eximieron de pago 40.000 millones de dólares deuda a la dictadura cubana, lo que equivale al 50% del actual PIB de Cuba, según Forbes.
Los acreedores del Club de París en 2015 cancelaron, además, 8.500 millones de dólares en deuda pendiente. La dictadura cubana siempre hace lo mismo, pedir prestado, dilapidar el dinero, empobrecer a la población e impaga sus compromisos. Y luego se queja de «embargo».
Entre Rusia, China, Venezuela y sus principales socios comerciales han dado ayuda financiera y donaciones a la dictadura cubana que superan los 200.000 millones de dólares en los últimos 16 años. Mucho más, por ejemplo, de lo que ha apoyado el FMI a cualquier país de Latinoamérica. Una ayuda financiera que se ha esfumado.
A pesar de todo ello, y con una política monetaria tan destructiva como la venezolana, imprimiendo pesos sin valor ni demanda mientras dilapida las reservas que recibe, la inflación en 2021 alcanzará el 500% según The Economist.
¿Qué ha hecho la dictadura cubana con ese reguero de dinero? Dilapidarlo mientras condenaba a su pueblo a la miseria.
Cuba tiene un nivel de pobreza que, calculado de manera independiente, llega al 50%. Por otra parte, según cifras de la ONEI, el 35,6% de la población en edad laboral no tiene empleo o está desocupada. El desastre monetario y económico haría descender el Índice de desarrollo humano para Cuba, del puesto 73 a los últimos lugares entre los países del mundo.
«El comunismo es un sistema fallido, universalmente fallido, y no veo al socialismo como un sustituto demasiado útil» decía Joe Biden el jueves 15 de julio.
¿Qué es lo que ha hundido a Cuba? El comunismo devastador, no el inexistente bloqueo.