La Fiscalía vasca asegura que habrá «generosidad» si ETA se disuelve

DIARIO VASCO, 4/10/11

El Poder Judicial reivindica su aportación «decisiva» al final de la violencia. El lehendakari y el presidente del TSJPV destacan la complicada tarea de juzgar «bajo la amenaza terrorista»

El Poder Judicial vasco reivindicó ayer su contribución «decisiva» al nuevo escenario de paz y libertad que se está abriendo en Euskadi y uno de sus máximos exponentes anunció que si ETA declara su disolución definitiva, «la Justicia y el pueblo sabrán reconocerlo y ser generosos». Fue concretamente el fiscal superior, Juan Calparsoro, quien pronunció estas últimas palabras que resonaron especialmente en el acto institucional con el que cada año se abre el nuevo curso y que se celebró ayer en Bilbao. En él, el lehendakari Patxi López y el presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), Juan Luis Ibarra, resaltaron la complicada tarea de juzgar «bajo la amenaza terrorista» durante tantos años y, aunque dedicaron buena parte de su discurso a tratar sobre la crisis económica y sus consecuencias, también hicieron mención al final de la violencia que ya «estamos acariciando».

En su intervención, el máximo representante de la judicatura vasca puso en valor «la respuesta» de la Justicia vasca «a la criminalidad liberticida» y aseguró que ese trabajo ha supuesto una «contribución decisiva» para «consolidar la expectativa de un nuevo tiempo» en Euskadi, el tiempo de libertad, paz y construcción de la convivencia que parece que poco a poco comienza a asentarse. Ibarra recordó que los jueces «conocemos bien lo que significa juzgar bajo la amenaza terrorista» y destacó la tarea de «cumplir y hacer cumplir la ley en contextos de intolerancia», un hecho en lo que -dijo el presidente del TSJPV- él y sus compañeros tienen «dilatada experiencia».

Además, valoró «el enorme esfuerzo» del Tribunal Supremo y el Constitucional para «hacer efectivos la garantía y los límites de la libertad de asociación política y derecho fundamental a la participación», en referencia implícita a los casos de Sortu y Bildu.

En el mismo sentido, el lehendakari, que por primera vez copresidió la apertura del año judicial junto a la presidenta del Parlamento Vasco, Arantza Quiroga, reclamó que no se cuestionen las actuaciones de la justicia «según conveniencias particulares» y llamó a «legitimar» las decisiones judiciales y «respetarlas», aunque «se esté o no de acuerdo con ellas». López defendió la labor de la justicia y le otorgó también un papel relevante en el avance hacia el final de la violencia. «Todos tenemos algo que aportar», señaló mientras se felicitaba porque «la democracia ha vencido al terror».

«Anormalidades»

López, quien además de hablar sobre pacificación recogió la petición de los jueces para activar medidas contra los deshaucios, se mostró convencido de que «estamos acariciando» ya «el final de la pesadilla terrorista», pero insistió en la necesidad de «mantener la exigencia democrática» al mundo etarra para que acabe «definitivamente con su estrategia de terror» y se «integren en democracia». El lehendakari conservó su tono exigente respecto a ETA y el esperado anuncio de su final definitivo, tal y como ha sostenido en sus últimas intervenciones públicas tras el comunicado que la organización armada emitió este fin de semana.

El lehendakari recordó, no obstante, que ETA no ha desaparecido y que, pese a los avances que se van dando y la ausencia de actos violentos y atentados desde hace meses, persisten todavía «anormalidades inaceptables en democracia» como el hecho de que todavía la amenaza no se haya evaporado definitivamente y que los jueces, políticos y fiscales tengan que llevar aún escolta.

Pero sobre las intervenciones de Ibarra y el lehendakari, ajustadas al acto institucional, destacó sin duda el discurso del fiscal superior del País Vasco, por su tono directo y, sobre todo, por su contenido audaz. Juan Calparsoro se dirigió directamente a los miembros de ETA para decirles: «Disolveos, pedid perdón a las víctimas de este país por el enorme daño que habéis causado y decid definitivamente que ‘ya está bien’».

El fiscal superior reclamó de esta manera «valentía» a los miembros de la organización terrorista y aseguró que si anuncian su disolución definitiva «el pueblo y la Justicia que emana del mismo sabrán reconocer ese paso y serán generosos para comenzar de nuevo a construir una sociedad justa, libre y plenamente democrática donde quepamos todos, también vosotros».

Estas palabras resonaron con fuerza en el auditorio de la sede del TSJPV, donde escuchaban atentos los máximos responsables institucionales y de la judicatura como la consejera de Justicia, Idoia Mendia.

«Sed valientes»

«Dad el paso que esperamos todos», les dijo Calparsoro. El paso que también esperan, aseveró, «muchos presos, sus familias y miembros de la izquierda abertzale». En el mismo tono directo, el fiscal superior reconoció que es preciso «tener mucho valor» para dar el paso de poner fin a 50 años de violencia y «cambiar de vida», para salir de la «clandestinidad» y «mirar a las víctimas a la cara y pedirles perdón», pero recordó a los etarras que «todos os lo estamos pidiendo a gritos».

Pero recordó a todos los integrantes de ETA que «ninguna ideología, patria, utopía o idea» pueden estar por encima «de la vida de una joven que muere por una bomba, de un niño que queda ciego para siempre o de cualquier ser humano. Tenedlo claro».

DIARIO VASCO, 4/10/11

DIARIO VASCO, 4/10/11